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INTRODUCCIÓN
Uno de los significados de la palabra Teruah es: “soplido”. Dios sopló sobre nosotros aliento de vida y en la celebración de Yom Teruah, o Fiesta de las trompetas, el instrumento que se usa es el shofar; entonces, cuando suena el shofar significa que el aliento que nosotros tenemos, se lo devolvemos a Dios a través de este instrumento. El shofar es el clamor del hombre, es la oración que el hombre levanta a Dios, también es la advertencia de guerra, pero va dirigida a Dios. El shofar representa la voz de Dios en la tierra. Tal vez no sabes cómo tocar este instrumento, pero tu boca se convierte en la voz de Dios en la tierra.
Son cuatro los sonidos principales del shofar, aunque tiene más sonidos. El primer sonido es el Tekia, y su significado es que reconocemos a Dios como nuestro Rey. El segundo sonido es el Shevarim y significa que nosotros nos doblegamos y nos humillamos ante Dios; y los cristianos también reconocemos a Jesús como nuestro Señor. El tercer sonido es el Teruah y quiere decir alarma; es un sonido de alarma que representa el llamado de Dios o nuestro despertar. Con este sonido la iglesia se despierta, el ejército de Dios se despierta. Y el último sonido es el Tekia Gadolah, lo que significa el llamado de Dios a encontrarse con su pueblo. Este sonido es especial para nosotros porque como dice la Biblia, un día esta trompeta o Tekia Gadolah va a sonar, y nosotros los hijos de Dios vamos a encontrarnos con el Rey de reyes y Señor de señores. A través del shofar, Dios nos llama la atención; porque el sonar del shofar no es otra cosa que Dios hablando, es el aliento de Dios en nosotros hacia Dios y hacia el pueblo.
FIESTAS ORDENADAS POR DIOS
En el primer día del mes séptimo del calendario de Dios, el calendario el lunar; al décimo día y el día 15 se celebran las fiestas de otoño. En esos días comienza el otoño en Israel, es por eso que son las fiestas de otoño. Es una época en la que culminan las cosechas y se recogen los frutos, como las manzanas, olivas, granada; también se usa la miel en estas festividades ya que hace alusión al año nuevo dulce que se desean unos a otros en Israel en estas fechas, o Rosh Hashanah. Aunque este comienzo de año no es el primer día del año del calendario de Dios. Hay cierta confusión entre lo que es la fiesta de año nuevo y la fiesta de Yom Teruah, esta última es la fiesta que ordenó Dios, la cual encontramos en Levítico 23.
La fiesta de Yom Teruah está regida por determinada posición de la luna en el firmamento. Yom significa día, y Teruah significa: clamor, júbilo, alarma, etc. Dios ha tratado de llamarnos a nosotros la atención para que no nos distraigamos con cosas vanas, porque el mundo fácilmente nos distrae. Y muchas veces, la gente, por no andar buscando a Dios, por no respetar los mandamientos o las festividades del Señor, se pierde de su norte y termina adorando criaturas, imágenes, etc. Solo Dios es digno de ser adorado y solo Él es divino. ¿Para qué hizo Dios los astros del cielo? Los puso para señorear el día, esto es el sol; y para señorear la noche, esto es la luna.
En los primeros días de la creación, Dios tenía en mente un proyecto, un designio para las lumbreras: el sol, la luna y las estrellas. Leemos en Génesis 1:14: “Dijo luego Dios: Haya lumbreras en la expansión de los cielos para separar el día de la noche; y sirvan de señales para las estaciones, para días y años”. Hago una salvedad aquí; en Génesis leemos que Dios hizo las lumbreras para que sirvan de señales, esto es para las moadim, lo que significa: celebraciones o situaciones especiales. O sea que no solo marcan la noche, el día, mes o año, sino que el sol y la luna fueron creados para llamarnos la atención y para convocarnos a las celebraciones de Dios. Dios decidió desde el Génesis que nosotros tendríamos que guardar determinadas ocasiones. En el año 2020 la celebración de la fiesta de Yom Teruah ha tenido lugar los días 19 y 20 de setiembre de nuestro calendario occidental, que sería el primer día del mes séptimo para Israel.
La fiesta de las trompetas no tiene ritos, sino que simplemente es un llamado de alerta o llamado de atención. Yom Teruah es una celebración de clamor. Volviendo a las fiestas de otoño, hay tres celebraciones que hay que guardar. Como señalé, la fiesta de Yom Teruah se celebra en occidente el 19 y 20 de setiembre, (en Israel un día se cuenta, en este caso desde la noche del 18 hasta la tarde del 19). La siguiente se celebra a los diez días, el 27 y 28 de setiembre, y es Yom Kippur, la fiesta más solemne del año. Esta celebración nos recuerda un gran acontecimiento que es la expiación.
YOM TERUAH = EL ANUNCIO (LA SEÑAL) DE SU VENIDA
Nosotros, al no conocer las fiestas del Antiguo Testamento no entendemos desde nuestra perspectiva y creemos que son simplemente fiestas judías. Pero en el Nuevo Testamento se hacen alusiones a estas fiestas; tanto los discípulos de Jesús hicieron mención de estas fiestas como el Señor mismo. Yom Teruah y Yom Kippur son dos fiestas que anuncian la segunda venida de Cristo. Yom Teruah es el clamor que se oye a media noche cuando se escucha: “¡Ahí viene el novio!” Mateo 24 narra lo que Jesús dijo acerca de las señales antes del fin y de su regreso cuando dice: “E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas” (Mateo 24:29).Notemos que Jesús dijo: “E inmediatamente después de la tribulación”. Después de esto habrán señales en el cielo, y agrega: “Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria. Y enviará sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos, de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro” (Mateo 24:30 y 31).
Dice la Biblia en 1ª Tesalonicenses 4:16: “Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero”. Esta es la señal o la manifestación.
Cristo viene inmediatamente después de la tribulación, y en aquellos días se oscurecerán el sol y la luna, y las estrellas caerán del cielo. Este tiempo tiene que ser tiempo de celebración y de gozo para aquellos que sabemos que hemos sido perdonados, que tenemos vida eterna y que el Señor nos viene a buscar para llevarnos con Él. ¡Jesús viene a llevarse a su novia para casarse con ella! Este es un tiempo de expectativa, aunque para los judíos no lo es ya que estos les llaman a los próximos diez días después de Yom Kippur: “Diez días de terror”. En Israel luego de Yom Kippurcomienza lo que ellos llaman: un tiempo de “Teshuva” o de arrepentimiento. Es un tiempo en que ellos buscan a Dios para ser perdonados de sus pecados porque no pueden pasar Yom Kippur sin haber sido perdonados. Y si no son perdonados, entonces son condenados. O sea que hay una mezcla de dulce con amargo. Algunos no están seguros del perdón de sus pecados; hay quienes están siendo dominados por sus pecados, y lo están escondiendo. Aunque no lo podrán esconder de Dios. Si debes ser salvo tiene que ser hoy. Si necesitas el perdón, tienes que ser perdonado hoy. ¡No esperes más tiempo! Porque vendrá una fiesta de Yom Teruah que será la última; será la última vez que anunciemos que Cristo viene.
Esa fiesta, la última, será el último aviso; por eso se llama la fiesta de la última trompeta, es decir que nunca más se avisará que Cristo viene. En Yom Teruah se aclama la venida del Señor con trompeta y nunca más. ¡Hay que estar alertados! ¡Cristo vuelve! Seremos salvados y glorificados; tendremos un cuerpo nuevo. El pecado no podrá nunca más contra nosotros. Vendrá un día en que se celebrará el último Yom Teruah, y vendrá un día en que se celebrará el último Yom Kippur, que es día de expiación. Ese día se separan los cabritos de los corderos. Ya no esperaremos otro año para celebrar Yom Kippur porque será el último. Y está próximo este tiempo. Es por eso que la iglesia cristiana se está despertando a esta celebración y es porque Dios nos quiere enfocados en esas cosas en las que quiere que tengamos puesto nuestro norte. ¡Pongamos nuestra mirada en el Señor!
CALENDARIO DE DIOS Vs CALENDARIOS SECULARES
En la figura, en la línea vertical hay un punto rojo arriba y otro abajo; eso significa el primer día del mes. En el punto de arriba vemos el calendario que Dios le ordenó a Moisés y el primer mes del año comenzaba con Pascua, que fue la salida del pueblo de Egipto. Y al séptimo mes, el primer día de ese mes, Dios ordenó celebrar Yom Teruah. Viniendo el tiempo, ocurrió como con el 25 de diciembre para nosotros, día en que se celebra el nacimiento de Jesús; pero Jesús no nació en diciembre, porque en Israel, en diciembre es invierno y los pastores no están acostados en el pastito mirando las estrellas pastando ovejas porque cae nieve y hay menos de cero grados de temperatura. Entonces, andando el tiempo, (vemos el segundo punto rojo abajo) después de la salida de la esclavitud de Babiloniaapareció otro calendario y surgió la historia de los sabios de Israel quienes hicieron la cuenta de cuántos años había desde ahí hasta la creación del hombre que es muy importante para ellos. Y es por eso que ellos celebran la fiesta de Rosh Hashanah, o sea, año nuevo; y comienzan el año a partir de la tarde del 18 de setiembre hasta la tarde del 20 de setiembre del 2020. O sea que el primer mes del calendario que ellos están usando ahora y que es lunar como el otro; el primer mes es setiembre. Ahora comienza el año en Israel como lo que para nosotros sería el primero de enero. Y para los que celebramos Yom Teruah, entre la tarde del 19 y la tarde del 20 de setiembre es el primer día también, pero del séptimo mes.
Aparte, para más confusión, nosotros tenemos el calendario gregoriano, y para nosotros el 19 y 20 de setiembre son días como cualquier otro.
YOM TERUAH = DÍA DE CLAMOR
El apóstol Pablo le dijo a los tesalonicenses: “Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero” (1ª Tesalonicenses 4:16). No es un toque de trompeta cualquiera. Digamos que hay muchas situaciones en las que el pueblo de Israel toca trompeta; pero hay una, como señala el apóstol Pablo cuando dice: “a la final trompeta”. Esta es la trompeta de Yom Teruah; aunque la de Yom Kippur es otra trompeta, sin embargo la última es la que anuncia: “¡Ahí viene el novio!” No significa esto que en Yom Teruah resucitamos ni que viene en el día de Yom Kippur; aquí da una explicación de lo que sucede en los diez díasconsecutivos. El clamor no es el arrebatamiento, pero viene el novio a buscar a su novia. Para entender esto claramente necesitamos tener en cuenta el relato de la parábola de las diez vírgenes. Había cinco vírgenes prudentes y cinco insensatas. Las prudentes cuando escuchan la trompeta de Dios saben que viene el novio y están preparadas. ¿Conoces una novia que no se acuerde o no sepa del día de su casamiento? Cuando viene el novio a buscarla, ella está en zapatillas y con ruleros porque se olvidó de su casamiento. ¿Has conocido alguna novia así? La Biblia dice que la iglesia estará limpia, pura, resplandeciente, expectante y llena de amor el día de su casamiento. ¿Por qué nosotros festejamos Yom Teruah? Porque tenemos una gran expectativa de nuestra boda. Las cinco vírgenes insensatas que menciona la Biblia no están preparadas; están de zapatillas y rulero, piensan que el novio se va a demorar. Dice la Biblia que todas cabecearon y se durmieron, pero las que tenían sus lámparas llena de aceite, o sea que tenían el fuego de Dios y estaban llenas del Espíritu Santo, se levantaron y entraron a las bodas con el novio.
YOM TERUAH = DÍA DE ACLAMACIÓN Y JUBILO
A la fiesta de Yom Teruah también se le llama: “día de aclamación y jubilo”. Y hay dos Salmos que se utilizan para esta celebración; uno es el Salmo 47:1 y 2 que dice: “Pueblos todos, batid las manos; aclamad a Dios con voz de júbilo. Porque Jehová el Altísimo es temible; Rey grande sobre toda la tierra”. Dice aquí que Jehová es Rey grande sobre toda la tierra. ¿Por qué? En la fiesta de Yom Teruah también se reconocía públicamente y legalmente a un rey. Un rey asumía su mandato en cualquier momento, pero no era oficial hasta que se celebraba la fiesta de Yom Teruah en la que se reconocía y se ungían a los reyes. O sea que en esta fiesta no solo estamos anunciando la segunda venida de Cristo, sino que también estamos aclamando a Dios y a Jesucristo como Rey de reyes y Señor de señores. También dice el Salmo 47:5 al 7: “Subió Dios con júbilo, Jehová con sonido de trompeta. Cantad a Dios, cantad; cantad a nuestro Rey, cantad;porque Dios es el Rey de toda la tierra; cantad con inteligencia”.
YOM TERUAH = DEBEMOS PRESENTAR OFRENDAS
Dice la Biblia en Romanos 12:1: “Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional”. En todas las fiestas ordenadas por Dios, el Señor quiere que nos presentemos con ofrenda. La mejor ofrenda somos nosotros. La ordenanza que hay respecto de las fiestas que Dios celebra es esta: “Ningún trabajo de siervos haréis; y ofreceréis ofrenda encendida a Jehová” (Levítico 23:25). En todas estas fiestas el pueblo debía presentar sus ofrendas a Dios. Y en este tiempo, entre otras cosas ofrecían el fruto de la cosecha, como el de las uvas, manzanas y las olivas; entonces el pueblo presentaba como ofrenda las cosechas.
Y Dios ordena presentar ofrenda encendida a Jehová. La ofrenda más importante que se hacía era el holocausto, una ofrenda del todo quemada; y el pueblo debía elegir lo mejor del ganado para presentar a Dios. Ese animal que ellos ofrecían al Señor sustituía al pecador que merecía la muerte. Así que ese animal, aunque era el mejor que tenían y ellos estuviesen encariñados con él; por más lindo que fuera o más caro, reemplazaba a la persona. Más vale entonces quemar al animal en el altar de Dios. Y el apóstol Pablo le dice al pueblo: “Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que es vuestro culto racional”. La mejor ofrenda para Dios eres tú y es lo mejor que tienes. Dios decidió enviar a su Hijo Unigénito y lo hizo por amor; la mejor ofrenda fue la vida de Cristo Jesús que entregó por nosotros en la cruz del calvario. Dios ofrendó a su Hijo porque nos ama profundamente.
EL DÍA NI LA HORA DE SU VENIDA, NADIE LO SABE.
EL TIEMPO DE SU VENIDA, LO SABEMOS SUS HIJOS
Anteriormente señalé que hay dos Salmos que se recuerdan en la celebración de Yom Teruah, ya cité uno, y el otro es el Salmo 27, versículos 13 y 14, los cuales dicen lo siguiente: “Hubiera yo desmayado, si no creyese que veré la bondad de Jehová en la tierra de los vivientes. Aguarda a Jehová; esfuérzate, y aliéntese tu corazón; sí, espera a Jehová”.
Estamos aguardando la venida del Señor. Estos son tiempos difíciles para la humanidad, pero de mucha expectativa para los que creemos en Dios. Dijo Jesús a sus seguidores, hablando de su venida: “Velad, pues, porque no sabéis el día ni la hora en que el Hijo del Hombre ha de venir” (Mateo 25:13).
Algo muy relevante ocurre en la fiesta de Yom Teruah; ocurre que en el momento en que la luz del sol ilumina la luna, dejándonos ver un haz. Previamente la fase lunar es nueva y es una luna oscura, lo que significa que la tierra de interpone entre la luna y el sol. Pero en el primer día del séptimo mes según el calendario de Dios, en la celebración de Yom Teruah, había dos testigos observando la luna, y cuando vislumbraban el primer brillo lunar, ellos avisaban al sumo sacerdote y este con un pestañeo avisaba a los que tocaban la trompeta. Jesús se refirió a una frase, al decir que nadie sabía el día ni la hora, que se usaba habitualmente en aquel entonces y tenía que ver con la fiesta de Yom Teruah. No se sabe el día el día ni la hora de la aparición de la luna porque hay dos días de diferencia, por lo que no se sabe la hora exacta y en qué día.
Pero no son días inciertos, al contrario, se está esperando esa celebración. Sólo quienes no conocen a Dios ni conocen su palabra, y los que ignoran las cosas de Dios, no se enterarán. Vendrá el Señor, así como ladrón en la noche; mas habrá gente que sin conocer acerca de esto estará comiendo y bebiendo, casándose y dándose en casamiento, y no entenderán nada hasta que se cierre la puerta. Hubo un período entre el tiempo en que Noé construyó el arca y advirtió de la venida de un juicio. Pero se burlaron de Él y no le creyeron; hasta que llegó el día en que Dios cerró la puerta del arca. Hoy las puertas en Yom Teruah están abiertas, pero en Yom Kippur se pueden cerrar definitivamente y los que queden afuera serán condenados.
Entonces, los dos testigos observaban la luna, cuando veían un pequeño brillo daban aviso al sumo sacerdote quien estaba expectante, y este,enseguida, con un abrir y cerrar de ojos daba la orden para que se tocaran las trompetas. Esto es causa de confusión porque la gente no sabe mucho acerca de esta celebración, y hay quienes señalan que no se sabe el día ni la hora en que vendrá Cristo, pero esta es una frase que se usa en la fiesta de Yom Teruah. El apóstol Pablo dijo a los corintios lo siguiente en 1ª Corintios 15:52 “…en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados”. Un día será la última celebración de Yom Teruah y será la señal de lo que sucederá luego. Esto es una advertencia, es un clamor de lo que está por suceder. El clamor es: “¡El novio está llegando!” Ya no habrá otro año de espera; no volverá a haber otra fiesta de Yom Teruah y tampoco de Yom Kippur. Y Dios quiere enfocarnos en lo eterno. Los que conocemos las escrituras sabemos que aun falta que se cumplan algunas profecías, como la construcción de un tercer templo, el surgimiento de un individuo que vendrá por obra de satanás y querrá gobernar el mundo. Pero Dios afirma en su palabra: “Los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento; y los que enseñan la justicia a la multitud, como las estrellas a perpetua eternidad”. (Daniel 12:3); y el apóstol Pablo nos advierte: “Mas vosotros, hermanos, no estáis en tinieblas, para que aquel día os sorprenda como ladrón” (1ª Tesalonicenses 5:4).
CONCLUSIÓN
Hoy Dios te está hablando para que tú no estés en tinieblas; el Señor no permitirá que su pueblo sea sorprendido como ladrón. Termino con Mateo 25:6 que dice así: “Y a la medianoche se oyó un clamor: ¡Aquí viene el esposo; salid a recibirle!” Los que creemos en Cristo Jesús somos la novia que está esperando la llegada del novio. ¡Iglesia prepárate! Tú dices que un pecadito acá y otro allá no es nada. No es nada a los ojos de los demás, pero ese pecadito te deja afuera con tu lámpara sin aceite. Es por eso que el pueblo de Israel, a partir del 19 de setiembre, tiene diez días en los cuales meditan acerca de su vida. Y yo te pido que lo hagas tú también. Pregúntale a Dios qué hay que no hayas confesado y pídele que quite de tu vida eso que está estorbando tu relación con Él y sea motivo de condenación. Presenta tu vida al Señor y pídele que perdone aún esos pecados que te son ocultos; eso que ha quedado bien guardado y no ha sido confesado. La Biblia dice en 1ª Juan 1:9 que: “Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad”. Este es un tiempo en que Jesús está purificando a su iglesia, porque no llevará a su novia si tiene apenas una manchita; llevará una iglesia que esté totalmente perdonada y limpia.
“Padre, intercedo por tu pueblo. Te pido que inquietes los corazones de aquellos que dicen que te aman para que hagan obras que demuestren que realmente te aman. Establece tu reino en nuestras vidas, derrama tu gracia sobre nosotros; derrama tu poder sobre tus hijos e hijas. Manifiesta tu gloria sobre padres y madres, sobre hijos y nietos. Bendice las familias, te lo pido en el nombre de Jesús. Establece tu verdad; establece tu reino en la tierra, en el nombre glorioso de Jesús. A ti damos honra y gloria Padre. Que tu pueblo tenga paz y tú alumbres el rostro de tus hijos, y que en este tiempo tu pueblo sea lumbrera para el mundo. Envía tu avivamiento, envía tu perdón y tu salvación Señor, te lo pido en el nombre poderoso de Jesús, amén”.
ANEXOS: