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INTRODUCCIÓN
El universo, la tierra y todo lo que existe le pertenece a Dios. Todo lo hizo para Él; aun a nosotros nos creó para Él. Y de todo lo que hizo, dice su palabra en Génesis, vio Dios que era bueno. Cuando creó al hombre y a la mujer, dice la Biblia, vio Dios que era bueno en gran manera. El Señor te hizo bueno y te hizo buena. Hizo todas las cosas con amor ya que de otra forma no las hace, porque su esencia es el amor. Capaz tú haces cosas desde el resentimiento o por causa de una tristeza que tienes, pero Dios no es ningún resentido ni lo afecta la tristeza. Dios es un Dios de amor, y así como son de altos los cielos respecto de la tierra; así es la misericordia de Dios sobre nosotros. Y su corazón gime cuando ve lo que está pasando en el planeta.
Como ya sabemos se estrenó la película “Sonidos de libertad” y me sorprendió el testimonio del director de la película Eduardo Verástegui. Este hombre tuvo un encuentro con Dios y decidió que nunca más iba a aceptar un trabajo, proyecto o cualquier cosa que fuera contra sus principios, sus valores y su fe en Dios. ¡Y lo cumplió! Todo lo que él hacía como actor iba contra sus valores y su representante le insistía en presentarle propuestas, que luego él rechazaba y le hacía perder dinero. Hasta que en un momento echó a todos los que trabajaban con él. Además de haber hecho pacto con Dios de no aceptar nada que fuera contra sus valores, también le prometió a Dios que no iba a tocar más a ninguna mujer porque entendió que el sexo es un regalo de Dios y es sagrado y tenía que reservarlo para compartir con la persona más importante de su vida después de Dios la cual sería su esposa, la madre de sus hijos, el día que se casara. Le preguntaron cómo podía vivir tanto tiempo sin tener relaciones. La decisión que él había tomado le costó muchas cosas; a tal punto que hubo un tiempo en que no tenía ni para pagarse un pasaje de avión porque no le daban ningún papel. Le preguntaron si esperaba que algún productor le presentara un proyecto santo y puro y lo desafiaron a convertirse en un productor. Entonces, con dos personas más formó una compañía, aunque no tenían dinero. Pareciera ser que el pacto que hizo con Dios lo arrastró a vivir en una miseria muy grande.
Paralelamente al estreno de Sonidos de Libertad se estrenó la película Indiana Jones, que costo 200 millones de dólares. Y siendo que la primera solamente costó 14 millones de dólares, sin embargo, desde el primer día que se estrenó ha sido número 1 en taquilla. Verástegui conoció a un tal Tim Ballard, ex agente del Departamento de Seguridad Nacional de EE. UU. Tim también dejó su trabajo porque quería hacer más para rescatar a los niños de la esclavitud moderna, por lo que dedicó su vida a la lucha contra el tráfico de niños en todo el mundo. Las víctimas de la trata de personas son principalmente niñas y niños que son forzados a realizar trabajos forzosos, prostitución y otros delitos terribles. Cuando ya nos les sirven más les quitan los órganos para venderlos. Lo que descubrió este hombre es que quienes se dedican a esto son personas encumbradas del mundo, personas ricas y poderosas. Tal vez has oído hablar acerca de la isla pedófila de Epstein. Muchos personajes de la política y del mundo del espectáculo han visitado esa isla para tener sexo con niños.
Quiero insistir acerca del ensañamiento que tiene satanás con los niños. Aunque esto no es algo nuevo. En tiempos bíblicos, las naciones que Dios entregó a Abraham eran naciones que sacrificaban niños. Y es que satanás detesta la pureza. Cuando Dios creó al hombre, al ver lo que había hecho dijo que era bueno en gran manera, y es por eso que satanás quiere destruir todo lo bueno y no quiere saber nada con el ser humano que ha sido creado a imagen y semejanza de Dios.
EL HOMBRE, ADMINISRADOR DEL PLANETA TIERRA
Al hombre se le dio ciertas virtudes que provienen solamente de Dios. El Señor nos creó para Él, para que hagamos sus obras. Dice la Biblia en Salmos 115:16: “Los cielos son los cielos de Jehová; y ha dado la tierra a los hijos de los hombres”. Dios les dio a los hombres la tierra para que dominen en ella como Él domina el universo. Somos los administradores de este planeta tan bello que Dios nos dio. Nosotros hemos sido creados por Dios y para Dios, para que en nuestro rostro brille el Señor. Y eso es lo que detesta satanás. Es que odia a Dios; y porque odia a Dios te quiere destruir. Y se ensaña contra todo lo que Dios ama.
En la película Sonidos de Libertad el actor que encarna a Tim Ballard nos dice que el negocio del tráfico de niños supera al negocio de la droga. Antes era un escandalo enterarnos que un abuelo había abusado de su nieta, así como un padrastro de una niña, etc. Pero esto del tráfico y abuso de niños ha ido en aumento y es un gran negocio para los pedófilos. El afán de satanás es destruir a los niños. Una de las cosas que se hacen en los ritos satánicos es beber la sangre de los niños. Pero no es que los matan y beben la sangre, sino que antes los torturan, los abusan sexualmente llenándolos de terror y consumen un compuesto que se origina al exponer a los niños a semejante atrocidades. El adrenocromo es un compuesto que se produce en el cuerpo y que aumenta durante los períodos de miedo y ansiedad. Torturan a los niños para provocar picos en el compuesto químico en sus cuerpos, antes de extraer el químico de su sangre, que luego beben o inyectan para drogarse y mantenerse sanos y jóvenes. Esta droga es muy costosa.
Estamos viviendo en un mundo muy complicado; no obstante, el mundo sigue siendo de Dios. Nunca le entregó la escritura del planeta Tierra a satanás ni a los poderosos del mundo. Esta élite se está apoderando del mundo y Dios los está dejando; pero Él es juez y les va a poner límite. Dios tiene en el mundo gente que trabaja para Él y para su reino; aunque no admite que cualquier persona trabaje para Él sino solo los que son sus hijos. Nosotros, sus hijos somos los herederos de todo lo que le pertenece a Dios. Cuando me entero de algún adolescente que se fue de su casa y se alejó de su familia, que anda por ahí sin rumbo destrozado por las drogas o el alcohol, mi corazón se estremece. Nuestro deber es rescatar a las generaciones que vienen. En cierta forma eso que están haciendo con los niños es culpa nuestra porque los representantes de Dios en la tierra somos nosotros, responsables de hacer prevalecer la verdad. La Biblia señala que la iglesia es columna y baluarte de la verdad. El engaño de satanás es hacerle creer al mundo que la verdad es mentira y que la mentira es verdad, e impone ciertas ideas engañosas. Dije, así como lo menciona la Biblia que todo lo que Dios ha hecho es bueno en gran manera.
EL HOMBRE REPRESENTA A DIOS
El hombre representa a Dios como padre y esta es la figura más distorsionada en estos días. Atendemos siempre, chicos y chicas a los que de alguna manera les ha faltado paternidad. Veo cómo los chicos y las chicas deambulan de aquí para allá buscando encontrar satisfacción en su corazón. Y Dios nos ha llamado a nosotros a alumbrar en medio de la oscuridad. Nos ha llamado a ser padres de los que no cuentan con sus propios padres. El mayor mal en el mundo es la disolución de la familia. Creer que el divorcio es la solución, esto provoca que los hijos se sientan desprotegidos. Veo con qué expectativas se acercan a nosotros buscando en quien confiar. Nos llegan a contar cosas que no le cuentan al psicólogo, y mucho menos a sus padres porque no les inspiran confianza. Y Dios nos dio de su gracia. Su amor y su misericordia en nosotros genera confianza en los niños y los jóvenes. El mundo no los valora, muchos padres tampoco valoran a sus hijos; y ellos necesitan eso que nosotros, los que amamos a Dios tenemos, que es el amor de Dios. “Como el padre se compadece de los hijos, se compadece Jehová de los que le temen” (Salmo 103:13).
La figura de padre es fundamental. Un matrimonio de la iglesia me manda una foto y me escriben: “Aquí esta nuestro príncipe, el regalo que Dios nos dio”. ¡Qué bien que les hace a los niños tener padres que los amen y los protejan! Que bendición para los hijos esos padres que tienen a Dios en sus vidas y comparten de esa sustancia divina. Porque algunos solo tienen dinero y les hacen regalos a sus hijos; pero no entienden que esos hijos, más que regalos necesitan padre. Conozco hombres que andan en las drogas y lloran por ver a su hijo. ¿Qué pretendes darle a tu hijo? ¡No te das cuenta que solo piensas en ti y no en tu hijo! ¿Qué ve tu hijo cuando te ve a ti? ¿Ve un padre centrado, dedicado y amoroso, o ve un hombre que no sabe que hacer con su propia vida?
Las parejas egoístas quieren el nene o la nena, pero solo para cumplir el deseo de tener un bebé y los hijos necesitan padres que sean padres de verdad. Hacen falta hombres de valor. Eduardo Verástegui se propuso no hacer nada que atentara contra su fe y su Dios. Llegó a estar en la ruina, pero se mantuvo firme. Y cuando más apretaba la cosa produjo su primera película. En su peor momento surgió un matrimonio muy adinerado, él les presentó un proyecto y el matrimonio accedió a poner dinero. Hizo su primera película, no con mucho dinero, y la presentó en un festival de cine en Toronto, ganando el primer premio. Dios lo había empezado a bendecir. Ya hizo dos películas, y la última producción es Sonido de Libertad. Esta película se ha proyectado en el parlamento de Estados Unidos ya que muestra un problema real en el mundo y es que los niños son secuestrados para tráfico, abusados, torturados y asesinados. Este es el peor delito de la humanidad contra Dios.
CONCLUSIÓN
Recibamos el desafío de Dios. Por mi parte, le pido a Dios que en lo que me queda de vida pueda levantar bien en alto su verdad. Dios tiene gente en la tierra, los cuales somos nosotros; y si no quisiéramos tomar el desafío de predicar su verdad y trabajar para su reino, Él levantará gente de las piedras porque el planeta es suyo. Ojo aquel que conociendo la verdad se aleja de ella porque el Señor va a juzgar y va a castigar a aquellos que conociendo el bien no lo hicieron.
La Biblia dice en Santiago 4:17 que al que sabe hacer lo bueno y no lo hace le es pecado. Pecar no es solo lo que haces mal, sino que también es el bien que sabes que tienes que hacer y no lo haces. Esto es pecado de omisión. Mas Dios hoy quiere darte la oportunidad de arrepentirte y comenzar de nuevo.
Si estás dispuesto o dispuesta has un pacto con Dios y dile que no importa lo que te cueste, te vas a consagrar y vas a hacer su obra. Dila a Dios: “Padre, toma mi vida y úsame. Que yo no pase por este mundo desapercibido, sino que deje una marca. Establece tu reino en mí, Señor. Que yo tiemble a tu palabra delante de tu presencia. Decido hoy comprar tu verdad, y no la venderé por nada. Decido hoy consagrarme para hacer tu obra. Lléname con tu Espíritu Santo, te lo pido en el nombre de Jesús, amén”.
ANEXOS: