RESURRECCIÓN: UN HECHO INCUESTIONABLE

¡Los creyentes no tienen conciencia de lo que está pasando! ¡Ha muerto un dios! ¡Murió Sai Baba! ¡Qué significativo para mí que haya muerto en el día en que celebramos la resurrección de Jesús! Murió el que dijo que era la reencarnación de tres dioses ya que no le alcanzaba con uno; se proclamó dios, ¡a ese nadie lo quiso crucificar! ¡Lo reverenciaron, lo honraron y adoraron! ¡Altísimas autoridades, príncipes y gobernantes de naciones quisieron estar con él! Uno de los que le ha dado mucho dinero a Sai Baba fue George Harrison, quien hasta le compuso una canción titulada: “Mi dulce señor”.

Sai Baba ha sido acusado de pederastia en Australia, Inglaterra, Estados Unidos; he estado leyendo información acerca de gente que visitaba el lugar de meditación que el mismo George Harrison mandó a construir donde moraba ese gurú, por ejemplo un matrimonio que tenía pasión por Sai Baba fue a visitarlo con un hijo de dieciséis años. ¡A ellos le habían concedido siete entrevistas, en cambio al hijo lo hicieron pasar veintiún veces! Al final el joven terminó confesándole a sus padres que el gurú lo abusaba…

Según las noticias, han preparado un entierro extraordinario para este dios hindú, exhibirán durante dos días su cuerpo muerto y al tercer día lo enterrarán. ¿No te alegra tener un Dios vivo? ¿No te alegra tener un Dios al que la tumba no pudo detener? ¡Para mí es muy significativo saber que todo el pueblo cristiano celebra la resurrección de nuestro Señor Jesucristo! ¡Y no ha habido sistema político, ni filosofía atea, ni ha habido poder demoníaco ni ningún ejército que haya podido tapar y callar la verdad que proclamamos y es que Jesucristo se levantó de la tumba y venció la muerte! El dios Sai Baba dijo que iba a morir de noventa y seis años, pero murió de ochenta y cinco. ¿Cuánto durará la historia de Sai Baba?La Biblia lleva siglos y siglos de publicada. Si la historia de la resurrección de Jesús fuera una mentira, ¡qué bien hecha que está! ¡Cómo encontró Jesús, un hombre muerto hace dos mil años, una manga de tontos que saltan de alegría porque Él está vivo! 

Algunos creen que la fe es una historia mitológica, pero no entienden que la fe está viva, es un poder que nos hace penetrar en la verdad de Dios, y nos hace ver, porque la razón no puede entender cómo fue esto. Los discípulos no podían entender. ¡Cómo les costó llegar a entender que realmente Jesús había resucitado! Durante los días que el Señor estuvo enterrado y especialmente el domingo que resucitó, fueron días de turbación, de crisis en el que se mezclaban lágrimas y tristeza porque sus seguidores dijeron: “¡Perdimos al maestro!” Mucha gente lloraba y estaban angustiados, habían unas mujeres que esperaron al domingo a la madrugada para poder ponerle unas especias aromáticas ya que no habían podido ni siquiera ungirle porque Jesús había muerto en una festividad importante, entonces, no pudieron hacerle el tratamiento que se acostumbraba a los muertos. Así que tomaron su cuerpo, lo envolvieron en una sábana, lo metieron dentro del sepulcro y cerraron la cueva con una roca. Las mujeres fueron a la mañana del domingo muy temprano preguntándose: “¿Quién nos correrá la piedra?” ¡Cuando llegaron al lugar, la piedra estaba corrida! ¡La tumba estaba abierta! Se encontraron con un joven de vestidos resplandecientes que les dijo: “¿Por qué buscáis entre los muertos al que vive? ⁶No está aquí, sino que ha resucitado. Acordaos de lo que os habló, cuando aún estaba en Galilea, ⁷diciendo: Es necesario que el Hijo del Hombre sea entregado en manos de hombres pecadores, y que sea crucificado, y resucite al tercer día. ⁸Entonces ellas se acordaron de sus palabras, ⁹y volviendo del sepulcro, dieron nuevas de todas estas cosas a los once, y a todos los demás” (Lucas 24:5-9).

Si Cristo no hubiera resucitado, yo he estado por veinte años predicando, ¿para qué? ¡Lo hermoso del evangelio es que tiene la esperanza viva, la certeza bendita de la vida eterna y de la resurrección de los muertos! Si no, ¿para qué predicar cada día, y para qué atender a la gente? ¡Que se pudran! ¡Si no vamos a resucitar, comamos y bebamos que mañana moriremos! ¿Por qué predico el evangelio? ¡Porque no solamente le doy esperanza a la gente para el problema del momento sino que le estoy dando esperanza eterna! ¡Cristo venció la muerte y prometió darle vida eterna a todo aquel que cree en Él!

            EL EVANGELIO DIGNIFICA AL SER HUMANO

Algunos se han preguntado: ¿Por qué las mujeres fueron las primeras en enterarse de la resurrección de Jesús? Y alguien ha encontrado una respuesta teológica extraordinaria: ¡Es que de esa manera la noticia correría más rápido! Pero hay otra respuesta: Las mujeres creyeron inmediatamente. ¡Dios bendiga a las mujeres! Ellas fueron dignificadas por Jesús; fue el Señor quien nos enseñó a valorarlas, a amarlas, a darles honra. ¡Mujeres, es la civilización occidental y cristiana la que les dio valor a ustedes! Agradezcan a Jesús aquellas que han nacido en esta civilización, donde todavía se respeta un poco el hecho de que haya una sola mujer para un hombre.

Leí de alguien enla Indiaque tiene treinta y siete mujeres y no se acuerda del nombre de todas. ¡¿Cuánto honor, no?! ¡Espere el turno, si la llaman, bien y si no, siga participando! ¿Qué queda para los pobres hijos si apenas se acuerda del nombre de sus mujeres? ¿Se acordará del nombre de sus hijos? ¿Podrán correr los hijos de esas treinta y siete mujeres a los brazos del papá?

El matrimonio y la monogamia es parte del fruto de la bendición de Dios, que ha hecho que una mujer y un hombre se unan en amor y puedan tener una familia; además, hijos amados, deseados, valorados y criados con afecto. No como esas culturas donde la mujer no puede comer donde come el hombre y tiene que caminar detrás de su marido, nunca a su lado. Agradezcan aquellas mujeres que no están en una cultura donde se tienen que cubrir el rostro. ¡Sonrían, eso se lo deben a Jesús! Porque Jesús nos enseñó que debíamos amar al prójimo como a nosotros mismos y que tenemos que hacer con los demás como queremos que hagan con nosotros; Él nos puso a todos en el mismo nivel, no importa si es dama o caballero, si es un ser humano, tiene la imagen de Dios. El peor de los pichis es valorado por Dios, el peor de los drogadictos y asesino es valorado por Dios, y los que aman a Dios predican en las cárceles porque valoran a los delincuentes ya que éstos tienen la imagen de Dios. Jesús valora a los enfermos, no los manda a matar, ¡los sana, los bendice, los arrulla! Los que son de Cristo visitan a los enfermos, oran por ellos. ¡Tenemos un Dios maravilloso! Un Dios que vivió para los demás, no de los demás.

Muchos seguidores de Sai Baba comenzaron a ver que andaba en autos Mercedes y BMW de los más caros, veían también que circulaba mucho dinero, el gurú tenía dos círculos íntimos de personas con dinero que lo rodeaban y fueron los que proyectaron su imagen a occidente. ¡Suspiraban por el dios hindú! Según él, aseguró que reencarnará dentro de ocho años como mujer y no como hombre; de hecho, el gurú dijo que era la reencarnación de dos dioses masculinos y un dios femenino, así que tenía tremenda mezcla. Por eso fue acusado de muchas violaciones sexuales de jóvenes varones.

            LA VERDADERA HISTORIA DE LA RESURRECCION

Pero pasemos a la otra historia que es más linda; el infierno entero se levantó contra la resurrección de Jesús. Vinieron los líderes religiosos, los principales sacerdotes y hablaron con Pilato diciéndole: “Hemos escuchado que este mentiroso y engañador dijo que resucitaría al tercer día, queremos que te asegures que no se levante; que selles la tumba y pongas guardias no sea que vengan sus seguidores, se roben el cuerpo, entonces será peor el remedio que la enfermedad. Sus seguidores van a robar el cuerpo y dirán que resucitó” (Mateo 27:63-64). Los principales sacerdotes fueron a arreglar el asunto con Pilato, notemos que hicieron un acuerdo con el imperio romano, con el poder romano. Cuando ponían soldados a hacer guardia, éstos pagaban con su vida si se dormían o se iban del lugar donde los habían puesto. Digamos que el ejército romano era muy disciplinado y Roma era muy firme en estas cosas porque había conquistado muchas naciones por lo tanto el orden era primordial, así que, no había en el mundo mejores soldados para custodiar la tumba de Jesús como los romanos, y el sello romano. Me imagino que mientras ellos trataban de arreglar el lío con Pilato, Jesús estaba en la tumba, muerto, y comenzó a temblar diciendo: “¡Sonamos, los romanos me han cerrado la puerta, no voy a poder resucitar, me van a dejar encerrado aquí adentro y no voy a poder respirar!” ¡Traten de detener a Jesús, traten de detener el plan de Dios! Este plan de Dios fue pensado antes de crear al hombre, Y no es que pecó Adán y Dios se agarró la cabeza preguntándose qué hacía ahora, ¡no! ¡Cristo es el cordero de Dios inmolado desde antes de la fundación del mundo! Así que el plan de la muerte de Jesús y de su resurrección existe antes de que Adán pecara y aún antes de que existiera. Ahora, viene el imperio romano que es la potencia más grande del mundo y le tapa la salida a Jesús, ahí se va a quedar el Señor, muerto de sed y de hambre entonces no va a poder resucitar y si lo hiciera se vuelve a morir porque no puede salir. Pero viene un ángel, corre la piedra la cual habría que moverla entre varios hombres, pero el ángel la corre con un dedo, o mejor dicho la mira fijo y la piedra tiembla. Entonces, corre esa piedra y se sienta sobre ella. ¡Al ver esto los soldados romanos salen corriendo pero se olvidan de llevar el rollo de papel higiénico!

Fueron días de turbación, me imagino que los principales religiosos en esa Pascua no celebraron nada, primero quisieron asegurarse de que Jesús quede bien muerto y segundo que permanezca bien encerradito en la tumba. ¡Pero no pudieron! ¡Cristo resucitó de entre los muertos!

¿Por qué crees que los discípulos, desde el primero hasta el último aceptaron morir serruchados, degollados, crucificados cabeza abajo? Les decían: “¡Niega a Jesús! pero ellos respondían: “¡No, prefiero morir crucificado, pero no soy digno de morir cabeza arriba así que crucifíquenme cabeza abajo!” Los amenazaban: “¡Te vamos a serruchar!” Mas ellos respondían: “¡Serrúchenme, pero yo no puedo callar, no puedo dejar de decir lo que he visto y he oído!” ¡Gloria a Dios! ¡Los timoratos que el día jueves a la noche habían huido dejando solo a Jesús! Los timoratos que huyeron por su vida porque no tenían fuerzas para quedarse al lado del maestro, días después ven al Señor resucitado porque Él se les presenta y les dice: “Toda potestad me ha sido dada en el cielo y en la tierra, por tanto id y predicad el evangelio a todas las naciones”. ¡¿Quién puede detener esto?! El diablo me ha querido frenar muchas veces en estos últimos veinte años en Uruguay pero no lo ha logrado y cada vez predico con más ganas y entusiasmo y espero la segunda venida de Cristo.

Dos mil años de ejércitos, de filósofos levantándose contra el evangelio, el imperio romano se levantó contra el evangelio, quisieron taparles la boca a los cristianos pero éstos no se callaron y cada vez creían más. ¡Esto no lo detiene nadie! En Corea del Norte hay cincuenta mil cristianos encerrados en cárceles y torturados para que dejen de creer y son considerados subversivos para el gobierno coreano. ¿Crees que los harán callar, crees que esos cristianos tienen miedo? ¡Ellos tienen a Cristo viviendo en su corazón! ¡El poder de Dios está en ellos!

En China los han querido detener pero no lo han logrado, cada cincuenta mil creyentes que participan en una iglesia controlada por el estado hay quinientos mil que se congregan en iglesias ocultas, hacen reuniones en casa de familias. ¡Esto no se detiene! ¿Quién podrá detener el plan de Dios? La escuela laica lleva más de cien años enseñando que el origen del hombre está en la materia, que ésta es nuestra mamá y nuestro papá. La enseñanza laica en todo occidente ha querido meternos en la cabeza esta mentira. ¡No han podido! El testimonio más elocuente son los cristianos que se congregan, ¡no hay enseñanza laica que haya podido detener esto!

En el año 1919, en Uruguay, cuando se formalizó la separación de la iglesia y el estado, se rebautizó a la Semana Santa como Semana de Turismo y posteriormente también se le llamó “Semana Criolla”. Este movimiento laicista comenzó con el entonces presidente José Luis Batlle y Ordóñez. ¡Laicista, secularista! ¡Escribía Dios con minúscula, se burló de Él! Que me perdonen los que lo honran tanto, pero Batlle está bien muertito y nosotros hoy damos testimonio de que Cristo está bien vivito. El sistema laico ha querido tapar la semana Santa pero esta semana sigue siendo Santa en todo el mundo. ¡No hay laicismo ni ateísmo que pueda frenar esto! El mejor testimonio son los cristianos que se congregan para celebrar semana Santa.

El fenómeno de Sai Baba y otros gurús tenidos por dioses ha invadido occidente. ¡La gente está embobecida con los hindúes que les traen meditaciones y mantras! Van y se inclinan ante su señor gurú y le preguntan qué hacer, y éste les da un mantra el que tienen que repetir durante una hora, tres veces por día, como por ejemplo: “traca, traca, traca, traca”. ¿Qué significa? No importa el significado, lo que importa es que estés una hora diciendo: “Traca, traca, traca, traca”. ¡Y los occidentales están embobados con eso! Se sientan y empiezan: “traca, traca, traca, taca” Claro, si se sientan todo el día repitiendo ese mantra, es lógico que las mujeres tengan que salir a buscar bosta de vaca con la que hacen una especie de tortilla, la que usan de leña para cocinar; y es lógico que la mujer tenga que gastar casi medio día en buscar agua a kilómetros con un cántaro sobre su cabeza. Mientras los señores del hinduismo están: “Traca, traca, traca, traca”, cuando terminan de hacerlo, juegan a las cartas y no les surge la idea siquiera de decir: “Le vamos a poner un cañito a estas pobres mujeres para que tengan una canilla aunque sea a una cuadra.” ¡Damas, agradézcanle a Jesús el agua corriente, la canilla por donde sacan agua!

Sepan que las universidades no la fundaron los laicistas y materialistas, sino los sacerdotes de los conventos; quienes comenzaron a enseñar ciencias fueron los cristianos y las universidades más importantes de Estados Unidos e Inglaterra fueron fundadas por iglesias cristianas. Luego vinieron los “pepe Batlle” y dijeron: “¡Esto es nuestro! ¡La enseñanza es laica, no queremos más que nos enseñen de religión!” Criticaron a la religión porque se equivocó en muchas cosas como por ejemplo que la tierra era el centro de todo, mas la ciencia se equivoca todos los días pero se le perdona porque es ciencia. La ciencia sí se puede equivocar, porque investiga, se da cuenta que está mal y sigue investigando, pero no se burla de ella misma, aunque sí se mofan de los creyentes y del cristianismo.

El imperio romano se levantó contra el evangelio y ¿qué era lo más fuerte que se predicaba? Que Jesucristo resucitó, que quiere entrar en tu corazón, que tiene poder para cambiar tu vida, Él puede quitar tu amargura porque no es una historia, es un Dios vivo y poderoso. ¡No es un mito! ¡Cristo puede arrancar la amargura, la soledad, Él puede perdonar tus pecados y arrancar la culpa que te hunde! ¡Él está vivo! No somos los creyentes quienes le podemos quitar la culpa a las personas, ¡es Cristo! No somos los creyentes los que podemos limpiar y lavar los pecados a los pecadores, ¡es Cristo! ¡Predicamos con tanto ahínco porque Cristo nos perdonó a nosotros y quitó nuestras culpas! No te estamos enseñando una teoría, esto es algo muy práctico y muy experimentado a los largo de los años: ¡El pecado hunde a las personas pero Cristo las cubre con su sangre preciosa!

El día de la resurrección fue muy complicado, porque cuando las mujeres fueron a contarle a los discípulos que Jesús había resucitado, dice la Bibliaque ellos no creyeron y señalaban: “Si nosotros lo vimos re contra azotado, lo vimos destruido; nosotros lo vimos llagado por completo, su cuerpo entero era una sola llaga. Nosotros vimos cuando lo clavaron, cuando el soldado romano atravesó su costado. ¡Jesús está bien muerto!” Pero las mujeres decían: “¡Ha resucitado! ¡Vimos un ángel, en la tumba no hay nadie, solamente hallamos la tela que lo cubría! ¡Fuimos a ponerle el ungüento para perfumar el cuerpo muerto pero Él no está!” Ese fue un día de idas y venidas, Pedro y Juan corrieron a la tumba, y cuando llegaron se encontraron con el mismo panorama que contaron las mujeres: el cuerpo no estaba.

Jesús se encontró con una mujer y le dijo: “¡Soy yo!” ella lo adoró y el Señor agregó: “Dile a mis discípulos, y dile a Pedro (el más bocón de todos, quien lo había negado) que voy delante de ellos a Galilea a encontrarme con ellos”. Ahí estaba Tomás diciendo: “Si yo no meto el dedo en el agujero de los clavos, no creeré”. ¡Uno de sus discípulos dudando!

Otro pasaje bíblico señala que cuando Jesús se les presentó, lo adoraron, pero algunos dudaban, o sea, se arrodillaron, comenzaron a adorar, pero abrían un ojo para ver si de verdad era el Señor. ¡No podían creer una cosa tan maravillosa! Jesús les reconvino: “¿Pero no les había dicho que era necesario que el Hijo del hombre padeciese y que fuese azotado, que muriera y al tercer día resucitase?” ¡Uno a uno se fue despabilando!

El día domingo de resurrección, el primer día de la semana, fue extraordinario. Jesús se encontró con dos discípulos más, camino a Emaús; ellos iban comentando tristemente lo que había sucedido y que ya no estaba el maestro. ¡Pero Jesús se les puso al lado y comenzó a hablar con ellos! A varios les había sucedido que hablaron con Jesús pero no sabían que era el Señor, no entendían, pero Él en algún momento les daba evidencia, por ejemplo, le dijo a Tomás: “Mete el dedo en mi llaga, ¿no ves que soy yo? ¡Miren mis manos y mis pies! No soy un espíritu, éstos no tienen carne ni huesos”. Y los discípulos quedaron de boca abierta; es más, Él les pidió algo para comer. ¡Jesús comió delante de ellos! ¡Qué glorioso día!

Los discípulos de Jesús, al final cayeron en la cuenta de que era Él, que había resucitado. Dice la Bibliaque les reprochó el no haber creído y la dureza de sus corazones, no obstante les dijo: “Vayan y enseñen a todas las personas lo que yo les he enseñado a ustedes, háganlos mis discípulos y bautícenlos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo”.

¡No hay hinduismo, no hay budismo, no hay poder que pueda detener el cristianismo, no hay ejército que lo detenga y no hay anticristo que pueda detener el cristianismo! El anticristo perseguirá y matará a los creyentes, tenlo por seguro, pero por cada creyente que mate, Dios va a aumentar la unción y el poder sobre la iglesia y aumentará la limpieza sobre ésta. ¡No podrá!

Me imagino el asombro del diablo porque murió Jesús y fue a parar al infierno. Ahí estaban haciendo fiesta, el diablo y todos los demonios: “¡Lo matamos, lo achuramos, está con nosotros!” Y en un momento Cristo se levanta y le dice: “¡Dame las llaves del hades!” Satanás queda endemoniado, mete la cola entre las patas y temeroso le da las llaves a Jesús. ¡Le arrebató las llaves de la muerte! ¡El que se enseñoreaba de las naciones, el que se enseñoreaba de la gente, le entregó las llaves al Señor!

¡Qué día el de resurrección! Qué día es cada día para aquel que ama a Jesús, para aquel que camina con el Señor. ¡Qué bendición! ¿Tienes bendición? ¿Tienes a Cristo en tu corazón? ¡Yo estoy tan agradecido a Dios! Me imagino cuantos millones de hindúes adoran hombres que se proclaman dioses, ¡cuánta gente ciega! Dale gracias a Dios por la oportunidad de escuchar estas palabras porque ellas son espíritu y son vida. ¡Dale gracias a Dios que no te engancharon con un “traca, traca, traca, traca”! ¿Sabes lo que produce esto? ¡Produce una tara en la mente! Tu mente queda en blanco y no funciona. ¡La miseria y la peste los consume! Pertenecen a una casta y no pueden salir de ahí ¡Qué igualdad ni que ocho cuartos! No pueden ni siquiera comer lo que comen las otras castas. ¡Qué cosa más linda hizo Dios con nuestras naciones y cómo están destruyendo los valores que hicieron de nuestros pueblos naciones fuertes! ¡Se están destruyendo uno a uno los valores que aprendimos de Jesús! Alegan que eso es científico. ¡No! ¡No es científico, es estúpido! Porque es crear una sociedad antítesis de las que tenemos. ¡Están destruyendo todos los principios! Si el matrimonio es entre un hombre y una mujer, ellos inventan un matrimonio con un animal o con lo que sea, pero que no sea como Dios lo estableció, que sea hombre con hombre, mujer con mujer o cualquier otra cosa, eso es antítesis, es buscar lo opuesto. ¿Quién dice que los hombres son hombres? Vamos a darlo vuelta, eso es antítesis; el hombre puede ser mujer. ¡Y la gente lo cree y lo repite!

¡Son los nuevos derechos existentes! ¡Quiero ver a un hombre darle pecho a un bebé! Señalan que es una cuestión cultural; he leído que la mujer tiene como ochocientos mil glóbulos rojos menos que el hombre por milímetro de sangre, o sea que tiene casi un litro menos de sangre que el hombre, ¡es distinta! ¿Por qué la quieren hacer igual? Ellos están creando una sociedad antítesis, quieren ver mujeres con voz de hombre, musculosas y peludas. ¡Es tan lindo ver una dama delicada, arregladita, dulce, suave! ¡Los hombres somos muy brutos, nos hace mucho bien que las mujeres nos bajen la brutalidad! ¡Hasta el más bruto queda embobecido cuando se enamora de una mujer suavecita!

¡Están dando vuelta todo! Estuve caminando por un parque y vi unas casas muy lindas, y por ahí había un cartel que decía: “No a la propiedad privada, sí a la propiedad colectiva” pensé: ¿Por qué no pusieron el cartel en los barrios más marginados? Un principio de la civilización occidental es el derecho a la propiedad privada, pero ellos no quieren, eso es la antítesis, quieren propiedad colectiva.

Nos quieren hacer creer que se puede tener una cultura y una civilización bien sin Cristo, pero es que sin Él no hay nada, se desmedra todo sin Cristo. ¡Gracias a Dios que la iglesia está luchando y está predicando el evangelio, dándole al mundo la esperanza que el laicismo y el materialismo le está robando!

Esto no es cuestión de ser cristiano porque nos sentimos bien, ¡no! Esto es una visión cósmica del mundo, de la sociedad. Cristo tiene una visión cósmica del mundo, de lo que Él quiere, y nos mandó a orar: Venga a nosotros tu reino y hágase tu voluntad en la tierra como se hace en el cielo. ¡Cristo tiene una cultura que instaurar en el planeta Tierra!

            CONCLUSIÓN

Si tienes que entregarle tu corazón a Cristo quiero darte la oportunidad en este momento. Toma una decisión seria, no vivas sin Cristo porque pierdes todos los controles, pierdes visión, pierdes idea de quién eres. ¡Él tiene el plan y el propósito para tu vida! ¡No te quedes sin Cristo, los tiempos se tornan peligrosos!

Esta sociedad sin Cristo me ha tildado de homófobo, Dios sabe que yo no soy así; he tenido charlas importares con homosexuales, no con los hipócritas sino con aquellos que abren el corazón y confiesan de verdad, lo que padecen, lo que sufren. Pero se les ha inyectado odio contra la sociedad; es verdad que la sociedad los ha querido eliminar, pero, pecadores somos todos, mas Cristo ama a los pecadores. Los homosexuales son pecadores como tu y como yo, pero, un solo toque de Dios y se va al diablo la homosexualidad y el lesbianismo. ¡No quieras ser lo que no eres!

¿Sabes que tienes que darle tu vida a Cristo hoy? ¿Sabes que no lo puedes dejar para mañana? ¿Sabes que la oportunidad que Dios te está dando es hoy? ¡Es un peligro dejar para mañana! ¿Sabes que eres enemigo de Dios por gobernarte como se te da la gana? ¿Sabes que los pecados que cometes te convierten en enemigo de Dios? ¿Quieres arreglar tus cuentas con Él? ¿Quieres pedirle perdón a Dios y decirle: Señor, te entrego mi vida? ¡Este es el día!

Señor, ¡toca a quienes debas tocar! ¡Desciende con poder Espíritu Santo! ¡Arranca la incredulidad ahora! ¡Arranca la duda, la vergüenza, la timidez, ahora! ¡Haz tu obra Jesús, te anhelamos, te bendecimos! Hoy queremos darte gracias por tanto amor. ¡Cuánto nos has amado Jesús! ¡Bendito sea tu nombre!

Si quieres darle tu corazón a Jesús, si estás cansado de pecar, de fracasar; si has vivido una vida cristiana hipócrita, mostrando cara de cristiano y de bueno pero continuamente has escondido tu pecado, esta es tu hora. ¡No luches contra el Espíritu de Dios! A Jesús no le asombra la magnitud de tu pecado, Él solo está mirando tu fe. ¿Tú crees que Él te puede perdonar? ¿Crees que te pueda dar vida eterna? ¿Tú crees que Él ha resucitado? ¿Puedes declarar hoy que Jesús es tu Señor? Quiero ayudarte a hacer una oración, Dios toma tu declaración de fe y la fe es certeza, así que tienes que orar con certeza; dile a Dios: “Señor amado, me presento delante de ti en respuesta a tu amor, necesito darte mi corazón y necesito vida eterna. Declaro que desde este día tú eres mi Señor, te pongo en el trono de mi vida. ¡Cúbreme con tu sangre, límpiame de mis pecados y de mis maldades y lléname de tu presencia! ¡Yo creo y te recibo en mi corazón! En el nombre de Jesús hago esta oración, amén”.

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