PROFECÍAS INFALIBLES ISRAEL AYER Y HOY - Misión Vida para las Naciones

Av. 8 de octubre 2335

Montevideo

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MENSAJES DEL CIELO

PROFECÍAS INFALIBLES ISRAEL AYER Y HOY

INTRODUCCIÓN

Hemos estado recientemente en Israel y realmente volvimos con el corazón henchido y agradecidos a Dios. Me dicen que para viajar a Israel se necesita dinero y, que a algunas personas se les hace imposible; en el último viaje que hicimos nos acompañó una abuela de ochenta años, que ha trabajado limpiando casas por hora. Esta abuela, por treinta y cinco años oró a Dios: “Señor, yo quiero visitar tu tierra”. Cuando llegó a Israel se tiró de rodillas al piso, levantó sus manos al cielo y llorando adoró a Dios por haberle permitido llegar. Otra hermana, que trabaja como modista, haciendo costuras y vendiendo delantales, bolsas para comercios, etc., logró recaudar el dinero suficiente para pagarse el viaje a Israel. Cuando llegó a Israel, se postró y besó el suelo. Hace varios años atrás, esta hermana escribió un poema, y según ella, lo que había escrito, se le cumplió. El poema dice así:

“Dame la mano Jesús, quiero conocer Judea, recorrer Jerusalén y llegar a Galilea. Sin cansancio ni fatiga, con cada día un renuevo, ver tu cuna carpintero, donde sin ser el Edén, en un pesebre en Belén, entre pajas y animales, a los mortales viniste. Sin techo, solo en pañales, pero rico en oro y plata y las cosas celestiales. Quiero tus huellas pisar, no me quiero desviar; donde anduviste un día, y decir con alegría, vi el camino del Señor, que Él con tanta pasión, traspasó toda frontera dejando todo su amor y con él la vida entera”.

Quiero decirte que a Israel no va quien tiene dinero sino el que quiere. Si anhelas ir y tienes fe que así será, verás realizado tu sueño. La abuela de ochenta años, una anciana que camina doblada, cuando la vi, pensé que se iba a cansar y nos iba a retrasar. Un día caminamos siete kilómetros y la abuela llegó primera al lugar. Subió escaleras, bajó escaleras, llorando y alabando a Dios. Fuimos a Jordania y luego cruzamos nuevamente a Israel, en la zona del Mar Muerto; nosotros llegamos muertos, pero ella tenía toda la vitalidad. Nos habían dicho que a partir de determinada hora había salvavidas en el lugar y el desayuno se servía a partir de las siete de la mañana, entonces, luego de desayunar nos íbamos a dirigir al lugar. Pues, la abuela se levantó a las cinco de la mañana y se fue al Mar Muerto en ayunas, sola; sin luz, sin salvavidas y sin nada. Cuando nosotros terminábamos de desayunar, ya ella llevaba tres horas bañándose en el Mar Muerto. ¡Qué bendición ha sido participar con estas dos hermanas!

Hoy quiero hacerte ver cuán importante es saber de Israel. Estar ahí en el lugar donde aconteció algo que cuenta la historia, estremece. No es lo mismo conocer de lejos por fotos, en el mapa, y sabiendo la historia, que estar ahí y poder palparlo. Cuando vas a Israel comienzas a tomar contacto con los lugares y con los personajes. Quiero compartirte las semblanzas del Israel de ayer y del Israel de hoy. Con esto quiero hacerte ver que Israel sigue siendo el reloj de la historia de la humanidad. Dios escogió esa tierra para manifestarse al mundo; y eligió gente de esa tierra para ungirlos con el poder del Espíritu Santo y para que el perdón de pecados y la vida eterna llegue a cada rincón del mundo. Hay gente que quiere viajar por el mundo, a mí no me interesa viajar a ningún otro lado más que a Israel; es la sexta vez que voy y anhelo regresar. El entusiasmo que me genera estar ahí y pisar la tierra donde caminó Jesús es inexplicable.

LA CASA DE LA SUEGRA DE PEDRO

¿Sabes por qué Pedro negó a Jesús? ¡Porque le sanó a la suegra! Pedro se vengó luego, del Señor, negándolo…!

Sobre lo que fuera la casa donde Jesús sanó a la suegra de Pedro han edificado una iglesia y le han puesto un piso de cristal para que se pueda ver abajo las ruinas de la casa. Jesús vivió en Capernaúm y eso, yo como tantos cristianos no lo teníamos en cuenta. Al llegar al lugar encontramos un cartel que dice: “Capernaúm, el pueblo de Jesús”. Eso me impactó y comencé a indagar cada detalle en la Biblia. Por ejemplo, leemos en Marcos 2:1 en adelante: Entró Jesús otra vez en Capernaúm después de algunos días; y se oyó que estaba en casa. E inmediatamente se juntaron muchos, de manera que ya no cabían ni aun a la puerta; y les predicaba la palabra. Entonces vinieron a él unos trayendo un paralítico, que era cargado por cuatro. Y como no podían acercarse a él a causa de la multitud, descubrieron el techo de donde estaba, y haciendo una abertura, bajaron el lecho en que yacía el paralítico. Al ver Jesús la fe de ellos, dijo al paralítico: Hijo, tus pecados te son perdonados”. Claro, una cosa es que te la cuenten y otra es que estés ahí. La casa de la suegra de Pedro era donde Jesús vivía. En el lugar, en ese momento, había fariseos y doctores de la ley, los cuales, dice la Biblia que cavilaban en sus corazones y se preguntaban: “¿Por qué habla éste así? Blasfemias dice. ¿Quién puede perdonar pecados, sino sólo Dios? Y conociendo luego Jesús en su espíritu que cavilaban de esta manera dentro de sí mismos, les dijo: ¿Por qué caviláis así en vuestros corazones? ¿Qué es más fácil, decir al paralítico: Tus pecados te son perdonados, o decirle: Levántate, toma tu lecho y anda? Pues para que sepáis que el Hijo del Hombre tiene potestad en la tierra para perdonar pecados (dijo al paralítico): A ti te digo: Levántate, toma tu lecho, y vete a tu casa. Entonces él se levantó en seguida, y tomando su lecho, salió delante de todos, de manera que todos se asombraron, y glorificaron a Dios, diciendo: Nunca hemos visto tal cosa”.  Lo que yo no sabía, es que lo que habían roto era el techo de la casa de la suegra de Pedro.

En esa casa sucedieron varias cosas; y a cuarenta metros de ahí se encuentra la sinagoga de Capernaùm donde Jesús enseñaba todos los sábados. Estar ahí no es lo mismo a que te lo cuenten; estar en el mismo lugar que estuvo Jesús, donde agujerearon el techo y el Señor levantó a un paralítico, es maravilloso y tremendo.

Como señalé anteriormente, a unos cuarenta metros de la casa de la suegra de Pedro se encuentra la sinagoga, y la palabra de Dios en Marcos 1: 21 en adelante nos relata que: “Entraron en Capernaùm; y los días de reposo, entrando en la sinagoga, enseñaba. Y se admiraban de su doctrina; porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas. Pero había en la sinagoga de ellos un hombre con espíritu inmundo, que dio voces, diciendo: ¡Ah! ¿qué tienes con nosotros, Jesús nazareno? ¿Has venido para destruirnos? Sé quién eres, el Santo de Dios”.

Cuando estuve ahí en la sinagoga pensé: “¡Aquí estuvo el endemoniado!” Estaba la gente ahí para escuchar palabra de Dios y aprender lo que Jesús les enseñaba; no obstante, entre los feligreses había uno que estaba endemoniado. Una persona religiosa, o sea, que sólo le gusta la religión, pero no tiene a Cristo en su corazón, no sería de extrañar que un mal espíritu dominara su vida. En el momento en que apareció este endemoniado todos los que estaban en la sinagoga vieron el poder y la autoridad que tenía el Señor. Por eso se hizo famoso. Jesús había venido a dar testimonio de Dios. Toda la majestad de Dios estaba en Él. Dice la Biblia que Jesús estaba lleno de la presencia de Dios. La sinagoga que visitamos es blanca, aunque todo lo que se construyó en Capernaúm fue de rocas negras ya que eran de la zona. Pero como sucedió con la casa de la suegra de Pedro y varios lugares más, han venido otras culturas posteriores que han edificado encima. O sea que de esas rocas blancas para abajo ha habido tres o cuatro siglos de la era cristiana. Al lugar que visitamos se le llama hoy: La Sinagoga Blanca. Posiblemente fue la sinagoga donde más veces entró Jesús.

Cuando visitas Israel conoces cosas y eventos que no encuentras en la Biblia. Nosotros no teníamos conciencia de que Jesús había vivido en Capernaúm. Entonces, viajar a Tierra Santa te edifica y te enseña mucho.

MAR DE GALILEA… En el Mar de Galilea se agolpan emociones y recuerdos de todos los eventos que ocurrieron allí. La mayor parte del ministerio de Jesús se realizó en el dicho mar y en sus alrededores.

Podemos ver atrás del mar de Galilea, las alturas del Golán, que pertenecían hasta el año 1967 a Siria, y en la guerra de los seis de días, Israel conquistó ese lugar. Jesús caminó sobre el Mar de Galilea, y Pedro le pidió poder caminar también sobre las aguas. Al estar en una barca en el mar, miramos hacia todos lados y nos preguntamos dónde habrá tenido lugar este acontecimiento. En otra oportunidad hubo una gran tormenta en el mar, la cual Jesús calmó. El Mar de Galilea es un lago; tendrá quince kilómetros de ancho por unos treinta y cinco de largo; sin embargo, allí se desatan unas tormentas impresionantes. Es un lago que está a unos doscientos metros por debajo del nivel del mar. Durante el día el aire se calienta y cuando asciende provoca una succión tan grande que atraen fuertes vientos del Mar Mediterráneo y provocan tormentas muy fuertes. A mí me parecía mentira que en un lugar tan chico se produjeran tormentas tan grandes. Sobre las alturas del Golán estaba Siria, y para ellos era muy fácil bombardear cualquier ciudad desde allí. Aunque es un territorio en disputa, Israel no tiene intenciones de devolverlo.

FOTO JARDIN DE LA TUMBA…

Se dice que ese lugar es el más probable, en el cual fue puesto el cuerpo de Jesús. Nos viene a la memoria el encuentro que tuvo María con Jesús en ese lugar. En el Jardín de la Tumba hay espacios para que los visitantes puedan tener reuniones de adoración y puedan participar también de la Santa Cena. Lo más lindo al visitar el Jardín de la Tumba es ver a las naciones llegar a ese lugar para adorar a Jesús. Afuera se pueden ver muchos ómnibus de miles y miles de personas de diferentes países que llegan al lugar. Eso nos recuerda lo que dice la Biblia de que las naciones van a presentarse delante del trono de Dios para adorar al Señor. Esta profecía está en Isaías 2:1 al 4 y también en Miqueas 4:1-2: ““Acontecerá en los postreros tiempos que el monte de la casa de Jehová será establecido por cabecera de montes, y más alto que los collados, y correrán a él los pueblos. Vendrán muchas naciones, y dirán: Venid, y subamos al monte de Jehová, y a la casa del Dios de Jacob; y nos enseñará en sus caminos, y andaremos por sus veredas; porque de Sion saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra de Jehová.”

FOTO VINO PROFETICO…

Visitamos una bodega que produce vinos, en Samaria. Las viñas y los vinos de Samaria tienen un gran significado. Sucedió que las diez tribus del norte de Israel fueron tomadas cautivas y dispersadas por las naciones; y nunca más se supo de ellas. Se les llama: las diez tribus de la dispersión. Se instalaron luego los árabes y los musulmanes, y en esas tierras nunca más se plantaron viñas, por ende, no se produjo más vino. Pero cuando Jeremías estaba profetizando que iban a ser llevados cautivos, Dios lo mandó a comprar tierra. Él estaba profetizando que iban a perder las tierras y el Señor lo manda a comprar un terreno; el trato tenía que ser por escrito, y debía guardarlo en una vasija, la cual tenía que enterrar para que se sepa luego lo siguiente que encontramos en el libro de Jeremías 31: 3 al 5: “Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia. Aún te edificaré, y serás edificada, oh virgen de Israel; todavía serás adornada con tus panderos, y saldrás en alegres danzas. Aún plantarás viñas en los montes de Samaria; plantarán los que plantan, y disfrutarán de ellas”.

Estoy hablando de dos mil quinientos años atrás. Más o menos, desde los años setenta u ochenta, se volvieron a plantar viñas en los montes de Samaria. Cuando la Biblia dice: “Oh virgen de Israel”, no se refiere a todo el territorio sino más bien al reino del norte, el territorio de las diez tribus desplazadas. A ese territorio, hoy, le llaman Cisjordania. Pero para nosotros los cristianos, sigue siendo Samaria. Le llaman Cisjordania porque los jordanos cruzaron en rio Jordán y tomaron esas tierras.  Y también las perdieron en la guerra de los seis días del año 1967.

Hablamos del reino del norte, y el Señor les dice a las diez tribus de la dispersión: “Con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia. Aún te edificaré, y serás edificada, oh virgen de Israel; todavía serás adornada con tus panderos, y saldrás en alegres danzas. Aún plantarás viñas en los montes de Samaria; plantarán los que plantan, y disfrutarán de ellas”.

En la bodega que visitamos nos dieron a probar sus vinos y nosotros con mucha emoción brindamos con un vino profético porque es el resultado del cumplimiento de las profecías de Jeremías. Los dueños de esa bodega han hecho una película acerca de cómo surgió esa bodega en los montes de Samaria. Hasta el año 1967 estaba en manos de los jordanos y no se plantaban viñas por lo tanto no se producía vino. Así que desde el 70, 80 y 90 comenzaron a plantar viñas. Y llegaron los del sur, los de Judea; llegaron al norte para plantar viñas siendo guiados por la profecía de Jeremías.

Hay una historia familiar muy linda acerca de la bodega. Resulta que el hijo el dueño luego de finalizar sus estudios, se iba a trabajar a Londres. La familia estaba triste, aunque no querían frenar sus proyectos de vida. Pero cuando este hombre iba a viajar a Londres, su padre se accidentó y se quebró por lo que lo tuvieron que internar. Entonces, el hijo postergó el viaje y en ese tiempo se hizo cargo de la vendimia. Se encontró con una joven que había conocido en su adolescencia y comenzaron a recordar los sueños que habían compartido en esa época. La joven lo amaba y le preguntó si se quedaba o se iba a Londres, a lo que él le respondió que definitivamente se iría. Aunque le pidió a la joven que se fuera con él, ella rechazó su petición porque no se iba a ir de su tierra natal, ya que allí estaba la sangre de sus padres.

El hombre se iba a Londres muy triste, pero sucedió que un día iba manejando su camioneta y rompió una vasija de barro, entonces se bajó a recoger los pedazos; en ese momento comenzó a tener una especie de visión de personas de épocas pasadas. En eso ve una ceremonia en la que rompen vasijas y él le pregunta a una de las personas por qué estaban rompiendo las vasijas, a lo que le responde que en las ceremonias de casamiento hay un momento en que se rompen vasijas. Cuando se termina la visión, ve que tiene los pedazos en la mano y va tomando contacto con la realidad del pasado y del presente. Hoy esa tierra le pertenece a él, pero hace dos mil quinientos años atrás fue habitada por sus ancestros. Así, tiene varias visiones hasta que es vencido por la realidad y finalmente se hace cargo de la bodega. Hoy fabrica una gran variedad de vinos, por los que ya ha obtenido unos cuantos premios internacionales. En Israel puedes aprender del pasado; en la enseñanza de la palabra de Dios está conectado el pasado con el presente.

MONTAÑAS DE SAMARIA…

Visitamos el territorio de Efraín. Allí fue erigido el Tabernáculo de Silo o como dice la Biblia: la casa de Dios, que en realidad era una tienda que llevaron los israelitas desde el desierto, y cuando se instalaron en la tierra prometida, pusieron en Silo el lugar de adoración. Todavía Jerusalén no era de ellos, todavía no había templo ni reyes, y sino sacerdotes. Ahí Ana derramó su alma delante de Dios y le pidió un hijo. El relato de 1ª de Samuel 1:10 y 11 dice así: “…ella con amargura de alma oró a Jehová, y lloró abundantemente. E hizo voto, diciendo: Jehová de los ejércitos, si te dignares mirar a la aflicción de tu sierva, y te acordares de mí, y no te olvidares de tu sierva, sino que dieres a tu sierva un hijo varón, yo lo dedicaré a Jehová todos los días de su vida, y no pasará navaja sobre su cabeza”. El sacerdote Elí no se daba cuenta de la aflicción de Ana y la tuvo por ebria. En ese entonces, Elí, el sacerdote no había estorbado a sus hijos, los cuales pecaban en la casa de Dios.

En ese lugar que visitamos también aconteció un hecho terrible. Uno de la tribu de Benjamín cortó en pedazos a su concubina y repartió sus restos por toda la nación, porque hombres de Benjamín la habían abusado. Silo se encuentra en territorio de Efraín. Allí hubo una guerra interna y murieron las mujeres y los hijos de Efraín, el cual quedó destruido, con pocos hombres. Ahí se tramó algo para que no pereciera una tribu de Israel; planearon una fiesta y le dijeron a los de Benjamín que cuando estuviera armada la fiesta, ellos debían salir de las viñas y arrebatar a las mujeres. Por tal motivo no pereció la tribu de Benjamín, la más pequeña. La tribu de Benjamín estaba en el sur, con la tribu de Judá.

En Silo, arriba, hay un edificio redondo, todo vidriado que tiene una membrana perforada. O sea que podemos ver las montañas que están afuera y sobre ese panorama se proyecta una película donde se visualiza la misma montaña; la real que está afuera y la proyectada que muestra la historia de ese lugar, como la historia que acabo de contar acerca de la tribu de Benjamín, la que está relatada en el libro de 1ª de Samuel.

Ana oró y Dios le concedió un hijo al cual le puso por nombre Samuel. Ya en aquel entonces, en Silo, Dios no se manifestaba y no había palabra de Dios allí. Pero Samuel no dejó caer ni una sola palabra a tierra y el Señor comenzó a manifestarse nuevamente, y otra vez comenzó a haber palabra de Dios en Silo. Según leemos en la Biblia, el Salmos 78 habla de la fidelidad de Dios hacia su pueblo infiel; pero notemos lo que dice en los versos 58 al 60: “Le enojaron con sus lugares altos, y le provocaron a celo con sus imágenes de talla. Lo oyó Dios y se enojó, y en gran manera aborreció a Israel. Dejó, por tanto, el tabernáculo de Silo, la tienda en que habitó entre los hombres”.

Al estar en ese lugar, en Silo, estremece saber que allí estaba la presencia de Dios, pero el pueblo lo provocó a ira, subiendo a otros montes a adorar otros dioses; por lo tanto, el Señor los desechó y se alejó de ese lugar, de la tienda donde había habitado entre los hombres. Hoy eso es un desierto increíble, aunque es un testimonio. En Daniel 12:4 se relatan las visiones que un ángel le estaba mostrando. El ángel le estaba hablando acerca del futuro y Daniel quería saber más al respecto, mas el ángel le dijo: “Pero tú, Daniel, cierra las palabras y sella el libro hasta el tiempo del fin. Muchos correrán de aquí para allá, y la ciencia se aumentará”.

Eso significa que la van a entender los que vivan en el tiempo del fin, y también en ese tiempo aumentaría la ciencia. Donde la ciencia más avanza es en Israel. Nosotros hemos visitado un centro de innovación inaugurado por el primer presidente de Israel, Shimon Peres. Esa nación tiene más premios nobel que cualquier otro país en el mundo y cuenta con más inventos patentados, que cualquier otro país. Los celulares, no importa qué marca sean, más del setenta por ciento de la tecnología de los aparatos celulares fue inventada en Israel. El tomate cherry, llamado así por su similitud con la cereza, fue invención de Israel. En cuanto a la medicina, los israelitas inventaron también el Stent: un tubo pequeño de malla de metal que se expande en la arteria. Hay muchas cosas que usamos habitualmente y son beneficios que nos han llegado de Israel. Gran parte de agua con la que se bañan las personas en Israel y la que es usada para tomar es agua desalinizada, tomada del Mar Mediterráneo, a la que le quitan la sal y se hace potable. Y eso no queda ahí. Cuando las personas se bañan, lavan la vajilla, etc., esa agua va al desagüe donde es llevada a siete centros diferentes del país, la cual se recicla. Israel recicla el ochenta y seis por ciento del agua cloacal; le sigue Estados Unidos que recicla apenas un veinte por ciento. El agua reciclada va por unas tuberías a la zona del Neguev para la agricultura. El cincuenta por ciento del agua utilizada para la agricultura es agua reciclada, y usan el método por goteo o aspersión para regar las plantaciones. La meta para el futuro es tomar del agua de las cloacas ya que están estudiando pasarla por varios filtros.

Por medio de estos métodos se busca solucionar uno de los problemas más importantes en el mundo y es el tema de escasez de agua. El setenta por ciento del territorio de Israel es desierto, sin embargo, el mundo entero ha sido beneficiado por el riego por goteo, lo que fue una invención de Israel. Y el ochenta y seis por ciento del agua reciclada es re dirigida al desierto con el fin de reverdecerlo, lo que lleva al cumplimiento de la profecía del Señor. Israel tiene muchas empresas de innovación, más que toda la Unión Europea junta; las cuales son subvencionadas por personas que ponen capital de riesgo, apostando por los inventos, aun sabiendo que no podrían dar resultado. O sea que la profecía del libro de Daniel se está cumpliendo mayormente en Israel.

Mientras estábamos disfrutando nuestra travesía por Israel, veíamos en nuestros celulares, noticias de eventos que estaba aconteciendo en esos momentos, como que Israel estaba siendo atacado por misiles. Pero Israel cuenta con un sistema que detecta esos misiles y los destruye. Cuando partimos de Israel hacia Uruguay, nos llegó la noticia de que había sido atacado con doscientos misiles; y el noventa por ciento de esos misiles fue bloqueado. El misil que dispara Israel cuenta con una camarita en la punta, la cual le señala la trayectoria del misil enemigo a la persona que está en el centro de monitoreo. El que había inventado la camarita que va en el misil, estudió medicina, y se puso a indagar qué otra aplicación se le podría dar a esa cámara. Entonces, inventaron unas grajeas que la persona se toma y la camarita va recorriendo el aparato digestivo buscando alguna anomalía. Esta innovación deja obsoleta a la exploración mediante un tubo conocida como endoscopía. A medida que la camarita va recorriendo el sistema digestivo va enviando la información a una computadora. En Israel están dispuestos a inventar lo que nadie ha logrado aún. Ellos señalan que todo se puede hacer.

¡Tienen una fe increíble! Y eso es bíblico porque Jesús declaró que al que cree, todas las cosas le son posibles. Ellos no tienen miedo a sus enemigos, y son amenazados constantemente por todos lados. Pero el que tiene fe, no tiene miedo. Los israelitas han sido revestidos por fe de parte de Dios. Tienen bloqueada su mente, sus ojos y sus corazones; no reconocen al Mesías. Pero se puede ver al Espíritu Santo moverse en la nación de Israel. Como será le fe que tienen los judíos, que hay dos instituciones: KKL y Keren Hayesod, dos organizaciones creadas cuarenta años antes del surgimiento del estado de Israel. La gente que fundó esas ONG se propusieron tener un estado cuando era totalmente improbable, y nadie creía que Israel podría tener un estado. Sin embargo, estas instituciones comenzaron a comprar tierras; y los árabes les vendían arenales y pantanos, no le vendían tierras productivas. Pero ellos comenzaron a perfeccionar los métodos de riego para sembrar en el desierto. Lograron sembrar árboles, cuarenta años antes de la creación del estado de Israel. Hasta hoy llevan plantados doscientos cuarenta millones de árboles, lo que ha favorecido el clima en Israel; y se han propuesto hacer florecer el desierto.

Los agnósticos y los ateos saben que la Biblia dice que el desierto florecerá. ¡Ellos van a terminar creyendo! Isaías 35 dice así: “Se alegrarán el desierto y la soledad; el yermo se gozará y florecerá como la rosa. Florecerá profusamente, y también se alegrará y cantará con júbilo; la gloria del Líbano le será dada, la hermosura del Carmelo y de Sarón. Ellos verán la gloria de Jehová, la hermosura del Dios nuestro”.

Yo he visto que los judíos son incansables. No le tienen miedo al desierto ni al calor; no le tienen miedo a nada. Ellos enfrentan las dificultades y confiesan que van a salir adelante y nada ni nadie va a aplastar su nación. Dice a continuación en Isaías 35: “Fortaleced las manos cansadas, afirmad las rodillas endebles. Decid a los de corazón apocado: Esforzaos, no temáis; he aquí que vuestro Dios viene con retribución, con pago; Dios mismo vendrá, y os salvará. Entonces los ojos de los ciegos serán abiertos, y los oídos de los sordos se abrirán”. En cualquier momento los sordos oirán y los ciegos verán; y los que no creían van a creer. Y van a proclamar: ¡Bendito el que viene en el nombre del Señor!”

CONCLUSIÓN

Te quiero mostrar con este mensaje que Dios sigue obrando hoy como ayer. Las profecías que el Señor habló, hoy se están cumpliendo. La palabra de Dios sigue vigente en Israel. ¡Dios está obrando en medio de su pueblo! ¡Él es el Dios de la historia! Dice la Biblia en Isaías 2: 2,3 y 4: “Acontecerá en lo postrero de los tiempos, que será confirmado el monte de la casa de Jehová como cabeza de los montes, y será exaltado sobre los collados, y correrán a él todas las naciones. Y vendrán muchos pueblos, y dirán: Venid, y subamos al monte de Jehová, a la casa del Dios de Jacob; y nos enseñará sus caminos, y caminaremos por sus sendas. Porque de Sion saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra de Jehová. Y juzgará entre las naciones, y reprenderá a muchos pueblos; y volverán sus espadas en rejas de arado, y sus lanzas en hoces; no alzará espada nación contra nación, ni se adiestrarán más para la guerra”.

Mucha gente está visitando Israel, entre ellos cristianos y católicos; aun los empresarios que quieren invertir para estar a la vanguardia de la tecnología, visitan Israel para aprender más de ellos. En los viajes que he realizado a Israel he visto pasar millones de turistas; y una de las fuentes de trabajo en Israel es precisamente el turismo. Yo he visto que las profecías de la Biblia se están cumpliendo en todos los niveles. Israel es visitado por empresarios, profesionales, inversores, turistas cristianos y no cristianos. Y señala la Biblia que no son israelitas los descendientes de Abraham según la carne; el verdadero pueblo de Israel, son aquellos que han creído en Jesucristo. Nosotros no vamos a estar por fuera porque somos parte del pueblo de Dios. Hace un tiempo atrás, el primer ministro de Israel Benjamín Netanyahu citó a los medios de difusión cristianos de todos los países y les dijo: “Díganle a los cristianos que no tenemos en el mundo amigos más confiables que los cristianos evangélicos”.

Dile al Señor en esta hora: “Padre, yo también soy parte de Israel. Soy tu hijo, soy tu hija. Las promesas para Israel son también para mí. Yo tengo la fe de Abraham, soy linaje de Abraham tu amigo. Tu palabra dice que soy coheredero juntamente con Cristo. Señor, enséñanos tus caminos, muéstranos tus sendas. Quiero ver en mi vida, en mi familia y en mi país tu gloria. Padre, tú amas a las naciones. En esta hora te honramos y te bendecimos porque el Dios de Israel también es nuestro Dios; y el sustentador de Israel es nuestro sustentador. Creemos que el sanador de Israel es también nuestro sanador. No necesito ir a Israel para comprobar tu grandeza, sólo necesito ser consciente de que soy tu hijo, y creer que todas las promesas que le has dado a Israel también son mías. Señor, tú eres el autor y el consumador de la fe. Yo quiero tener esa fe. Hazme libre de mis temores y de la vergüenza; dame la capacidad de ser valiente, Padre. En el nombre de Jesús me presento delante de ti. Te necesito, Señor. No necesitamos un gobierno mejor; sólo queremos que nuestros ojos sean abiertos para ver que nosotros somos la luz y la bendición de nuestra tierra. Haz con nosotros conforme a tu voluntad, Padre. ¡Glorifica tu nombre! Abre nuestro entendimiento, danos inteligencia y sabiduría. Rompe las barreras que nos frenan, Señor. Hoy declaro que yo creo, porque para el que cree todas las cosas le son posibles. En tu nombre Jesús, y para tu gloria, amén”.

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