CADA NIÑO ES UN PROYECTO DE DIOS - Misión Vida para las Naciones

Av. 8 de octubre 2335

Montevideo

WhatsApp:(+598) 095333330

MENSAJES DEL CIELO

CADA NIÑO ES UN PROYECTO DE DIOS

INTRODUCCIÓN

Vamos a abrir nuestras Biblias en Proverbios 14:28: En la multitud del pueblo está la gloria del rey; Y en la falta de pueblo la debilidad del príncipe”. Hay otra versión que dice: “la población que aumenta es gloria del rey; una nación que se va extinguiendo es su condena”. Estuve recientemente predicando en un congreso del ministerio Remar en el África cuyo lema era: “Dejad los niños venid a mi y no se lo impidáis, porque de los tales es el reino de los cielos”. Y precisamente en ese ministerio se les da un lugar especial a los niños; ellos reciben a todo niño que aparezca tirado en la calle e incluso el gobierno, conocedor de su obra, les entrega niños que han quedado huérfanos. Me hospedé en una casa donde vivían alrededor de catorce niñas y una de ellas, de cuatro años, tenía SIDA, al igual que su madre, quien murió de SIDA. Este versículo que leímos nos enseña que el potencial de una nación está en proporción directa con el crecimiento de la población. Y hay otro pasaje que quiero compartir que está en Éxodo capítulo 1. Leeré varios versículos salteados. Versículo 7: Y los hijos de Israel fructificaron y se multiplicaron, y fueron aumentados y fortalecidos en extremo, y se llenó de ellos la tierra”. Ellos eran esclavos pero se multiplicaron y fructificaron y fueron aumentados y fortalecidos en extremo y se llenó la tierra de ellos. Los versículos 8 y 9 dicen: “8Entretanto, se levantó sobre Egipto un nuevo rey que no conocía a José; y dijo a su pueblo: 9He aquí, el pueblo de los hijos de Israel es mayor y más fuerte que nosotros. 10Ahora, pues, seamos sabios para con él, para que no se multiplique,…” Y los versículos 15 al 18 expresan: 15Y habló el rey de Egipto a las parteras de las hebreas, una de las cuales se llamaba Sifra, y otra Fúa, y les dijo: 16Cuando asistáis a las hebreas en sus partos, y veáis el sexo, si es hijo, matadlo; y si es hija, entonces viva. 17Pero las parteras temieron a Dios, y no hicieron como les mandó el rey de Egipto, sino que preservaron la vida a los niños”. Pasemos al versículo 20: Y Dios hizo bien a las parteras; y el pueblo se multiplicó y se fortaleció en gran manera. 21Y por haber las parteras temido a Dios, él prosperó sus familias. 22Entonces Faraón mandó a todo su pueblo, diciendo: Echad al río a todo hijo que nazca, y a toda hija preservad la vida”. Cuando el Faraón mata niños es porque tiene les tiene miedo, y, ¿qué tienen los niños para merecer el temor del Faraón? El Faraón es un cobarde y toda nación que mata niños es una nación cobarde. ¡En el crecimiento de la población está la fortaleza de la nación y en la disminución de la población está su ruina!

SATANÁS TAMBIÉN TIENE PLANES CON LOS NIÑOS

En el año 1966 el presidente norteamericano Lyndon B. Johnson en un discurso ante la ONU, dijo que iba a encaminar su gobierno y su nación hacia una política de control poblacional, pues invertir 5 dólares en la prevención de la natalidad, o mejor dicho en no dejar nacer niños, era equivalente a invertir 100 dólares en el desarrollo de un país. Este hombre en el año 1966 le declaró la guerra a la población mundial en el seno de la ONUcon ese discurso y creó la agencia AID, que es una agencia internacional para el desarrollo, y vean la palabra que utilizan “desarrollo” y un año después se crea en la ONU, un fondo para la población al que se llamó FNUAP, que en el año 1973 ya contaba con 100 millones de dólares pero hoy en día cuenta con miles de millones de  dólares. Gran parte de esos recursos se utilizan para prevenir el nacimiento de los niños. Asimismo en el año 1970 el Banco Central otorga por primera vez un préstamo para control demográfico. Robert Mc Namara, presidente de dicha institución desde 1968 hasta 1981, en su discurso inaugural del 30 de setiembre de 1968 afirma: “El rápido crecimiento demográfico es una de las mayores barrearas que obstaculizan el crecimiento económico y el  bienestar de los estados miembros de la ONU”.  En ese tiempo ha comenzado a hablarse en todos los discursos dela ONU y en todas las conferencias internacionales concernientes a la cultura, la niñez, la familia y la economía, de la explosión demográfica, como si los niños fuesen una bomba atómica, y se denuncia el grave peligro que implica la explosión demográfica. Se produce un punto de inflexión en el año 1974 cuando el conocido estadista y secretario del presidente Nixon, Henry Kissinger eleva un informe de defensa denominado “Memorandum de estudio para la seguridad nacional No200”. Después de la guerra fría el presidente Nixon quería saber cuál era el problema más grave que corría Estados Unidos en tema de seguridad nacional y el secretario de Estado, Kisinger le dijo que el problema mayor que Estados Unidos tenía era el crecimiento poblacional de los países pobres. ¡Cuado el Faraón mata es porque tiene miedo!

El problema era que los países ricos tenían una muy baja tasa de natalidad, a diferencia de los países pobres; para las naciones ricas, era un problema grave porque en los próximos treinta años, el crecimiento del mundo pobre les iba a cobrar, como se está cobrando ahora la pobreza, la miseria, el hambre. Ellos no han colapsado precisamente porque gran parte de la población de los países pobres emigra a Europa y Estados Unidos; la falta de crecimiento por índice de natalidad se ve enmendado por el ingreso de población de las demás naciones. Pero esto está afectando gravemente el relacionamiento; por ejemplo, en Inglaterra hay 5 millones de musulmanes, en Francia quizás más y en cualquier momento, puede salir un ”hombre bomba”.

Mi interés es que la iglesia crea la palabra de Dios, y nosotros hemos sido puestos por Dios para defender la multiplicación de la población dela RepublicaOrientaldel Uruguay. ¿Por qué se les tiene miedo a los niños? Se ponen excusas ridículas, se dice: “¿para qué vamos a traer niños si los haremos sufrir?” Declaramos que somos cobardes y que no somos capaces de alimentar niños y de darles educación, pero creo que debíamos gemir por el solo hecho de pensar así. Debiéramos de ser un país capaz de darle de comer a los niños, de darles amor y de educarlos para que el país crezca en población y aumente su potencial, pero Satanás tiene algo con los niños, ¡el siempre sufrió el embate de los pequeños! Al tiempo que nació Moisés, el Faraón mandó matar todos los niños pero hubo una mamá y un papá que se propusieron esconder y salvar su hijo y ese niño que ellos salvaron, sin saberlo, fue Moisés, el libertador del pueblo judío; ellos no sabían ni entendían que estaban preservando a un hombre escogido por Dios. Todos los niños que vienen al mundo son enviados por Dios; Él es el creador y el dador de la vida, Él manda niños, por tanto, Satanás vislumbra el perjuicio que ellos pueden ocasionar a las naciones porque dentro de cada niño viene todo el potencial de Dios para el futuro de la humanidad. Un niño no es lo que se ve, sino que es una tremenda promesa para el mundo. Dios no ve las cosas como nosotros las vemos, nosotros decimos “realidad” a lo que ven nuestros ojos, pero los ojos de Dios miran a través del tiempo. Para Dios un niño no es una criatura pequeña sino un hombre, cuando Dios envía un niño a la tierra, manda un hombre, de modo que cuando esos padres salvaron a ese niño, salvaron al libertador de Israel, a Moisés el gran siervo de Dios. Cuando tú preservas niños estás salvando planes de Dios, estás resguardando planes celestiales, los pequeños vienen por causa de Dios, El tiene propósitos extraordinarios con ellos.

Muchos conocen la historia de mi abuelo, cuando una granada estalló a su lado y todos sus compañeros del pelotón en la guerra de Italia pensaron que fue muerto, de modo que procedieron a enterrarlo en una fosa común, pero sorpresivamente él se quejó y vieron que estaba vivo. ¡Dios preservó la vida de mi abuelo! Él había planificado que se case con mi abuela, pero cuando regresó de la guerra, ella ya se había casado con el hermano de mi abuelo, pero no obstante, transcurrido un tiempo, mi abuela enviudó y pudo casarse con mi abuelo. Dios había planificado que de ese matrimonio naciese una niña llamada Vicenta Santamaría, porque ella daría a luz un pastor para Uruguay. ¡Dios tiene planes para los niños! Pero Satanás quiere niños abortados, turbados, tristes y frustrados, en tanto que Dios anhela multiplicar los niños sobre la faz de la tierra, quiere niños liberados de las maldiciones del infierno para llevar adelante sus planes, cada niño trae dentro un propósito de parte de Dios para el mundo, y nuestra tarea es descubrir cuál es el propósito de Dios con cada uno de ellos. Debes amar y ayudar a los niños. Jesús les ama y cuando sus discípulos se enojaron porque los papás querían traer los niños para que fuesen bendecidos por Él, se indignó. ¿Te lo imaginas a Jesús indignado? “Dejad a los niños venir a mí y no se los impidáis porque de los tales es el reino de los cielos…” y ¿por que? Porque Jesús trae planes dentro de cada uno de ellos. Un niño no es lo que ves a simple vista, un niño tiene tremendo potencial de parte de Dios, es una semilla que va a producir un gran bosque, ¡un pequeño es un peligro para Satanás!  Qué bueno que sepamos esto, y que entendamos que en la multiplicación de la población hay bendición, hay poder y potencial, así lo dicela Biblia, la palabra de Dios.

PARA DIOS, UN NIÑO ES UN HOMBRE

Generalmente los niños nos molestan y les decimos: “¡Cállate la boca! Cuando seas grande te explico, ¡esto es conversación de grandes!” Pero Dios tiene planes con ellos, que no nos imaginamos. Al lado de mi casa vivía una niña a la que siempre veía jugar con su muñeca, se llamaba Marta. Yo veía en ella sólo una nena, nunca me interesó y nunca me imaginé que Dios tendría planes con esa nena. Fue creciendo y creciendo hasta que un día la observo detenidamente y digo: “¡Uy, qué bonita!” ¡Dios tenía planeado que se casara conmigo! Los grandes no saben ni entienden que Dios tiene planes con los niños; siempre cuento que mi mamá quería una nena, pero Dios necesitaba una pastor, de modo que cuando nací, para Dios nació un apóstol. Del mismo modo, cuando nació Moisés, no nació un niño, sino un libertador. También, cuando nació Jesús, los reyes magos no fueron a ver un niño, ¡sino a adorar un rey! Un niño no es lo que se ve sino que es todo aquello que Dios tiene planeado hacer con un hombre, durante su estadía y aún después que parta de esta tierra. La obra que yo estoy haciendo aquí en Uruguay, cuando me muera, va a continuar, porque no soy lo que se ve, ¡soy lo que Dios tiene planeado conmigo aún para la eternidad! Tú has venido para algo grande y trascendente, que continuará luego del día de tu muerte.

Muchos cristianos dicen ”yo no soy nada”, no valgo nada, no tengo nada, no tengo palabras…estoy orando para saber qué dones tengo”. No saben a qué han venido al mundo, pero gloria a Dios por aquellos que saben a qué han venido. Los niños son un peligro para el reino de Satanás, un niño amado es una bomba en las manos de Dios; el doctor Juan Antonio Tripolote, recientemente nos enseñó que cuando una madre le da el pecho a su niño y al mismo tiempo le habla palabras de amor, el pequeño se fortalece en su ánimo, y comienza a sentir que vale la pena vivir y disfrutar del manjar de la vida. Dios ama a los niños y afirma la Bibliaque nadie podrá entrar al reino de los cielos si no se vuelve como un niño; tú no puedes entrar al reino de los cielos como un grande, el grande que hay en ti tiene que morir porque no recibe pues tiene la cabeza llena de ideas, está esquematizado… hemos crecido, hemos ido a la universidad, y ¿quién nos va a enseñar? Cientos de personas llegaron a la iglesia creyendo que el amor no existía porque han vivido ciertas experiencias que le hacen creer que no hay Dios. Algunos han dicho: “…cuando yo era chico le pedí a Dios por mi abuelita que tenía 99 años, para que no se muera, y se murió y a partir de ese momento, no creí más en Dios”. Los grandes estamos llenos de ideas, llenos de pensamientos, por tanto, Dios no puede tratar con nosotros; tenemos una naturaleza pecaminosa, contaminada, y es necesario que renunciemos a esa naturaleza para nacer del espíritu y así poder ver y entender las cosas desde el espíritu, porque ellas se han de discernir espiritualmente. Por lo tanto Dios no puede tratar con nuestra mentalidad, dice la Bibliaque él nos ha librado de nuestra vana manera de vivir la cual hemos heredado de nuestros padres. ¡Nada bueno hemos heredado de nuestros padres! La Bibliaafirma que lo que es nacido de la carne, carne es, de modo que si algo has heredado de tus padres, es de la carne. Lo único bueno que puedes tener es un nuevo nacimiento del espíritu y eso viene por un engendramiento divino dentro de ti. Dios pues, tiene que hacer una obra nueva en tu vida. Es necesario que renuncies a todas tus experiencias, sean buenas o malas, la naturaleza pecaminosa no puede heredar nada. Un niño tiene su mente vacía y es un recipiente que hay que llenar, pero una persona grande es un recipiente lleno y para poder hacer algo en ella, es necesario que primero se vacíe su cabeza. Dios no puede tratar con una persona grande que quiere retener su sabiduría, inteligencia, conocimiento y todo lo que recibió de sus padres, Él te dice: “Yo quiero ser tu padre, y quiero engendrarte de nuevo, por tanto, tienes que morir”, en otras palabras, Dios dice “yo te puede perdonar los pecados pero a ti tengo que matarte”, y si dices que si, se cumplirá eso en tu vida… El que halla su vida, la perderá; y el que pierde su vida por causa de mí, la hallará (Mateo 10:38). Por eso Jesús dijo que debemos volvernos como niños para recibir el reino de los cielos, Dios te enseñará todo de nuevo porque toda tu experiencia es nada delante de Él. Yo tengo un problema muy serio con mi madre, ella tiene 25 años más que yo y cuando voy a San Juan a visitarla, me dice: “Jorge toma la leche, cuídate…” Yo tengo 54 años de edad y dos hijas que ahora están de novio, soy un apóstol y tengo una iglesia grande, pero aún mi madre me dice: “Come la comida con pan”. “Mami, soy grande”, le recrimino, y ella replica: “¡Para mí siempre vas a ser pequeño!”  Del mismo modo, Dios me ve como un niño; yo creo que ya he crecido, que ya soy grande porque ya fui a la facultad, y tengo una experiencia increíble, pero jamás podré igualar su formación, si es que Él algún día tuvo que informarse de algo. ¿Cómo me puedo presentar delante de Dios, creyendo que soy algo y que sé algo? Muchos cristianos se creen más vivos que Satanás, y no se han percatado que él lleva mil años molestando gente y tú quizás tienes cuarenta años y te crees más vivo que él. ¡Satanás nos conoce muy bien! Hoy tenemos que pedirle perdón a Dios por ser tan “agrandados”, por creer que nadie ya nos tiene que enseñar cómo hacer las cosas… aunque los jóvenes dicen: “tú ya te golpeaste la cabeza, ahora me toca a mí”. ¿Crees que a medida que crecemos nos vamos formando? ¡No! ¡Nos vamos desformando! Es por eso que Dios no pudo hacer entrar a los hijos de Israel a la tierra prometida, porque tenían una “cabeza desformada”, con mentalidad de esclavo, por tanto, decidió introducir a sus hijos, aquellos que no nacieron en la esclavitud, porque era imposible quitar la mentalidad de esclavos en sus padres. ¡Líbranos de nuestra mentalidad ya formada Señor! No obstante, hay gente que tiene revelación y visión: ¿Sabes qué preguntaron los reyes magos cuando llegaron a Jerusalén? “¿Donde está el Rey de los Judíos que ha nacido?” No dijeron: “Nos han dicho que está por nacer un niño que quizás sea un príncipe, rey de Israel…” ¡Ellos tenían visión de Dios en sus corazones!

Mamá, ¿podrás ver así a tu hijo? ¿O eres de esas que dicen “tú nunca vas  llegar a nada”? ¿Podrá ser que mires en cada niño un rey y en cada niña un princesa de Dios? En el viaje que recientemente hice a África, me di el gusto de conocer algunos pastores, ¡que son príncipes! Conocí un pastor de Ghana, negro, que admiré desde que lo vi, el no tenía ningún complejo de ser negro. Nuestros padres no saben cómo será el niño que han engendrado, mi mamá buscaba una niña, pero aparecí yo… pero cada pequeño está en los propósitos celestiales. Tú has nacido mujer u hombre porque eres parte de los planes de Dios para el planeta tierra. Él necesitaba una mujer como tu, un hombre como tu…

CONCLUSIÓN

Dios tiene planes extraordinarios con cada uno de nosotros, pero por sobre todas las cosas hoy Dios quiere poner un amor especial por los niños del mundo, para que nunca más los mires como antes; Dios ama a los niños y no puede tener trato con gente a que no le importan los niños. Están naciendo niños en el mundo que le harán doler la cabeza a Satanás, y nosotros somos los responsables de llenarlos de fe, de esperanza, de bendecirlos en el nombre poderoso de Jesús, y poner en ellos la semilla incorruptible de la palabra de Dios. Si hoy quieres recibir un corazón nuevo para la niñez, Dios entonces, hará algo nuevo en ti. Si estás dispuesto, haz esta oración ahora mismo: “Señor hoy vengo delante de tu presencia para pedirte perdón por mi mentalidad de adulto, cerrada, por tantas veces que creí saber todas las cosa y no entendí que no sabía nada. Perdóname por las veces que he hechos las cosas por mi cuenta, sin consultarte, creyendo que hacía lo bueno cuando en realidad era de la carne. Perdóname por cuantas veces he pasado al lado de un niño y he mirado solamente un niño, y no un plan tremendo de parte de Dios en él. Hoy me levanto contra todo poder de Satanás que quiere destruir niños, que ataca a los niños a través de leyes. Reclamo que esta nación sea de bendición para la niñez. ¡Multiplica esta nación! Vengo delante de ti para pedirte que me dés un corazón de niño, un  corazón sensible a los niños y también un corazón para buscarte en cada decisión, que no crea que lo sé todo, que tenga una dependencia tal de ti, como un niño la tiene de su padre. Hoy declaro que tú sabes y conoces todas las cosas, que yo no soy sabio y que si algo de sabiduría tengo, es revelada y vine de ti. En el nombre de Jesús hago esta oración, amen”.

MENSAJES

MISIÓN

VIDA

PARA LAS NACIONES

Av. 8 de octubre 2335

Montevideo, Uruguay

WhatsApp: (+598) 095 333 330

email: info@misionvida.org

twitter: misionvidauy

facebook: iglesiamisionvida

Diseño: VerakaWeb